¿Son peligrosos los campos magnéticos de los automóviles eléctricos?

Bastante gente está preocupada por la posibilidad de que los campos magnéticos generados por los automóviles eléctricos puedan resultar peligrosos para la salud humana. Ante el incremento del número de vehículos impulsados eléctricamente, es muy conveniente despejar las dudas sobre este riesgo.

Un equipo internacional integrado por investigadores de siete países ha llevado a cabo un estudio que es el más exhaustivo realizado hasta la fecha en este campo. En la investigación ha tenido una participación importante la SINTEF (Fundación para la Investigación Científica e Industrial), una organización noruega que es la mayor organización independiente de investigación en los países escandinavos.

El equipo de la física Kari Schjølberg-Henriksen, de la SINTEF, midió la intensidad de los campos magnéticos en varios tipos de coches eléctricos, a fin de averiguar si se acercan a los valores máximos recomendados para la exposición humana. Las mediciones fueron llevadas a cabo usando coches reales en un laboratorio y también durante pruebas en la carretera.

Los valores más altos en los coches eléctricos se midieron cerca del suelo, en las inmediaciones de la propia batería, y en el momento en que se ponían en marcha los vehículos.

En todos los casos, se constató que la exposición a los campos eléctricos era inferior al 20 por ciento del valor máximo recomendado por la Comisión Internacional para la Protección Contra Radiaciones No Ionizantes” (ICNIRP, por sus siglas en inglés), la cual define los valores máximos aceptables de la exposición a campos magnéticos de diferentes frecuencias.

Las mediciones tomadas a la altura de la cabeza eran inferiores al 2 por ciento del mismo valor máximo aceptable.

Los resultados corroboran pues que no hay peligro. Ninguno de todos los tipos probados de automóvil eléctrico expone a los pasajeros a campos electromagnéticos más altos que aquellos recomendados por los estándares internacionales, y de hecho la intensidad del campo está muy por debajo del valor máximo recomendado.

Además de mejorar la confianza del público en lo que se refiere a los campos magnéticos en coches eléctricos, este proyecto también ha servido para crear un método estandarizado de medición de los campos electromagnéticos en tales vehículos.

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