Entomología
Ciertos insectos tienen un tercer par de alas, aunque ya es irreconocible
En la historia evolutiva de los insectos, no había constancia, hasta ahora, de la aparición de algo que pudiera ser definido como un tercer par de alas.
A lo largo de los 250 millones de años de evolución de los insectos, sí se sabe de casos de transformaciones de alas o pérdida de las mismas. Pero no de la existencia de un tercer par de alas.
Ahora, un equipo de científicos ha cambiado esta situación al presentar pruebas de que el exuberante "yelmo" de los insectos de la familia Membracidae, emparentada evolutivamente con las cigarras, es en realidad un tercer par de alas profundamente modificadas.
Casi se podría pensar que las diferentes especies de la familia Membracidae compiten entre sí en cuanto a la originalidad de sus formas, texturas y colores. Esta diversidad está en gran medida conferida por una estructura bastante sorprendente que cubre gran parte de sus cuerpos: el citado yelmo.
El equipo dirigido por Nicolas Gompel y Benjamin Prud'homme, del Instituto de Biología del Desarrollo de Marsella-Luminy (CNRS/Universidad Aix-Marsella 2), examinó detalladamente con un microscopio electrónico ese yelmo sobre el que tanto se ha debatido en la comunidad científica.
A diferencia del cuerno del escarabajo rinoceronte, el yelmo de un Membracidae no es una simple prominencia de la cutícula, sino un apéndice dorsal conectado a cada lado del tórax por una articulación, con músculos y una membrana flexible que le permite moverse.
Estas observaciones anatómicas han sido confirmadas por el equipo de investigadores a escala genética: Los mismos genes están implicados en el desarrollo de las alas y en el del yelmo.
Por tanto, se puede considerar que esos insectos poseen tres pares de alas, si bien el tercer par está muy modificado y por su forma resulta irreconocible.
Desde su aparición hace unos 40 millones de años, el yelmo de la familia Membracidae se ha liberado por completo de las limitaciones estructurales vinculadas al vuelo, por lo que, en este grupo de insectos, ese par de alas ha podido diversificar su forma y su textura.