Ingeniería
Circuitos impresos con tintas metálicas para robots blandos y dispositivos electrónicos flexibles
Lograr una electrónica físicamente elástica y lo bastante eficiente es vital para el despegue definitivo de nuevas tecnologías, como por ejemplo la de los dispositivos electrónicos flexibles, incluyendo los que se puedan llevar puestos como ropa, y también la de los robots blandos y flexibles.
El equipo de la ingeniera mecánica Rebecca Kramer, de la Universidad Purdue en West Lafayette, Indiana, Estados Unidos, está logrando avances prometedores en el desarrollo de una nueva técnica de fabricación que permita que las máquinas blandas se conviertan en más factibles comercialmente. Disponiendo, a un costo razonable, de electrónica estirable, será posible ver la tan esperada proliferación de tecnologías que se puedan llevar puestas y que no restrinjan el movimiento, así como de robots capaces de pasar por espacios pequeños. Los conductores eléctricos hechos con tintas pueden estirarse y deformarse sin romperse.
El nuevo proceso ideado por el equipo de Kramer permite imprimir conductores flexibles y estirables sobre cualquier cosa, incluyendo materiales elásticos y tejidos.
La tinta metálica que lo hace posible se elabora dispersando el metal líquido en un disolvente no metálico mediante ultrasonidos, lo que descompone el metal líquido original en nanopartículas. Esta tinta llena de nanopartículas es compatible con la impresión por chorro de tinta.
Después de la impresión, las nanopartículas deben ser conectadas definitivamente unas a otras, lo cual se hace aplicando presión lumínica, que convierte en conductor al material.