Medicina
¿Yoga para mejorar la salud en personas con algunos problemas cardiacos?
El yoga mejora la calidad de vida en pacientes con fibrilación auricular paroxística, según una investigación realizada por el equipo de Maria Wahlström, del Instituto Karolinska de Estocolmo en Suecia, y presentada públicamente a través de la revista académica European Journal of Cardiovascular Nursing.
Muchos pacientes con fibrilación auricular paroxística no pueden vivir sus vidas como quisieran: rechazan salir a comer con amigos, acudir a conciertos y viajar, debido a que temen sufrir un episodio de la dolencia.
Dichos episodios están acompañados por dolor en el pecho, mareos y otros problemas. Estos síntomas son desagradables y los pacientes se sienten ansiosos, preocupados y estresados por si les sucede uno de tales episodios. La mayoría aún trabajan y deben ausentarse por enfermedad para visitar el hospital. Muchos pacientes con la enfermedad recurren a terapias complementarias, a veces un tanto atípicas, de manera que es necesario averiguar si realmente ayudan.
La fibrilación auricular paroxística es el trastorno de ritmo cardíaco más habitual, afectando a entre el 1,5 y el 2 por ciento de la población general en el mundo desarrollado. No hay cura para la enfermedad, y su gestión se centra en aliviar los síntomas y en la prevención de efectos nocivos posteriores.
Los pacientes con fibrilación auricular paroxística experimentan episodios de esta que normalmente duran menos de 48 horas y que se detienen por sí mismos, aunque en algunos pueden durar hasta siete días.
El actual estudio incluyó 80 pacientes con fibrilación auricular paroxística que fueron distribuidos aleatoriamente entre un grupo en el que se practicó yoga y uno en el que no se practicó. Ambos grupos recibieron el tratamiento estándar con medicación y otras terapias médicas convencionales en función de las necesidades.
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Las sesiones de yoga se practicaron a lo largo de una hora, una vez por semana, durante 12 semanas, en el hospital, junto a un profesor experimentado. El programa incluyó movimientos suaves, respiraciones profundas y meditación.
Se midieron la calidad de vida, el ritmo cardíaco y la presión sanguínea en todos los pacientes al comienzo y al final del estudio.
Después de las 12 semanas, el grupo de yoga tenía puntuaciones de bienestar mental más altas, un ritmo cardíaco inferior y una presión sanguínea sistólica y diastólica más baja que el grupo de control.
La Sociedad Europea de Cardiología representa a más de 95.000 profesionales en cardiología de toda Europa y otras regiones del Mediterráneo. Su misión es reducir la incidencia de las enfermedades cardiovasculares en el continente. El congreso de esta organización es actualmente el más grande del mundo de entre los dedicados a medicina cardiovascular.



