Paleontología
¿La primera extinción masiva conocida fue provocada por animales?
Nuevas evidencias fósiles recién descubiertas en Namibia fortalecen la teoría de que la primera extinción masiva conocida en el mundo fue causada por organismos biológicos que acababan de surgir en la historia evolutiva, y que alteraron el entorno de forma tan radical que llevó a las especies más antiguas a la extinción.
El suceso, conocido como la extinción de finales del período Ediacárico, se produjo hace 540 millones de años. La vida más antigua en la Tierra consistía en varios tipos de organismos unicelulares. Estos mantuvieron el "monopolio" de la vida durante más de 3.000 millones de años, hasta cuando aparecieron los primeros organismos multicelulares. Los más exitosos de estos últimos fueron los ediacáricos, que se dispersaron por todo el globo hace unos 600 millones de años. Eran una forma de vida marina básicamente inmóvil, y sus individuos tenían formas anatómicas tales como discos, tubos, y frondas. De esas misteriosas formas de vida se sabe muy poco. Ni siquiera está claro si algunos de ellos eran animales o no.
Después de 60 millones de años, la evolución dio a luz otra gran innovación: la aparición de seres que claramente eran animales, y de los que derivan muchas familias actuales. Aquellos nuevos seres, ya calificables de metazoos, podían moverse espontánea e independientemente al menos durante algún momento de su ciclo de vida y subsistir comiéndose a otros organismos o lo que otros producían. Los animales irrumpieron en escena en un frenesí de diversificación que los paleontólogos han etiquetado como la explosión cámbrica, un período de 25 millones de años durante el cual aparecieron la mayoría de los grupos modernos de animales (vertebrados, moluscos, artrópodos, anélidos, esponjas y medusas).
Los fósiles con forma de disco aquí mostrados son restos conservados de estructuras anatómicas de la especie ediacárica Aspidella, que se extinguió aproximadamente un millón de años después de que murieran y se conservaran estos individuos. (Foto: Simon Darroch, Vanderbilt University)
Estas nuevas especies ejercían una notable influencia en su entorno, de modo que lo cambiaron, complicando más y más la supervivencia de los ediacáricos.
El equipo de Simon Darroch, de la Universidad Vanderbilt en Estados Unidos, ha encontrado uno de los ejemplos mejor conservados de una comunidad mixta de animales como los conocemos, y de ediacáricos. Esto representa la mejor prueba de una estrecha convivencia entre ambos grupos, lo que ilustra que los actos de uno podían afectar al otro. En este caso, las transformaciones hechas en el ambiente por los metazoos afectaron sin duda a los organismos ediacáricos.