Química
Almacenar hidrógeno en un depósito hecho mayormente de... hidrógeno
Los hidruros cristalinos, formados por hidrógeno y elementos ligeros como el boro, contienen grandes cantidades de hidrógeno, pero no lo liberan con facilidad, debido a sus fuertes enlaces químicos.
Ahora, se ha conseguido, por vez primera, cristalizar con éxito un hidruro muy poroso que puede contener mucho más gas y liberar esa cantidad adicional cuando sea necesario, como un depósito o una botella de gas.
El equipo internacional que ha hecho posible este avance tecnológico incluye a investigadores de las universidades de Louvain-la-Neuve (Bélgica), Aarhus (Dinamarca) y Ginebra (Suiza), así como del ESRF (Laboratorio Europeo de Radiación Sincrotrón) en Grenoble, Francia.
El hidrógeno es el más prometedor de los candidatos a combustible limpio para automóviles, camiones y otros vehículos. La razón principal de que no se le esté usando ya de manera amplia es la falta de un sistema de almacenamiento móvil barato y seguro.
En la actualidad, las dos líneas principales de investigación sobre sistemas de almacenamiento de hidrógeno se centran en sendas clases de materiales. Una de las líneas explora los hidruros complejos que contienen elementos ligeros como el boro, el nitrógeno o el aluminio. La otra línea explora materiales porosos conocidos como armazones organometálicos (MOFs por sus siglas en inglés).
Por desgracia, aunque los hidruros almacenan grandes cantidades de hidrógeno, sólo lo liberan a temperaturas relativamente altas.
Por su parte, los MOFs almacenan y liberan fácilmente el hidrógeno molecular pero sólo a temperaturas bajísimas.
El tipo de composición química de cada uno de estos dos grupos de materiales difiere de manera notable del otro, hasta el punto de que representan dos campos distintos de la química.
La nueva sustancia, obtenida por el equipo de Yaroslav Filinchuk y Bo Richter, combina las propiedades de ambos tipos de materiales: es muy poroso como un MOF, pero está hecho a base de un hidruro. Esta nueva forma de borohidruro de magnesio almacena un 15 por ciento de su peso en hidrógeno en el material en bruto, lo que representa una densidad de energía equivalente al 50 por ciento de la que tiene el gasóleo.