¿Mayor creatividad mediante una técnica de estimulación eléctrica cerebral?

Según las conclusiones a las que se ha llegado en una investigación realizada en el Centro Médico de la Universidad Georgetown en Washington, DC, Estados Unidos, la estimulación eléctrica cerebral del tipo conocido como estimulación transcraneal con corriente continua (tDCS por sus siglas en inglés), aplicada en unos niveles seguros, puede realzar nuestra capacidad de pensar de manera más creativa.

El equipo de Adam Green y Peter Turkeltaub utilizó la tDCS para estimular una región del cerebro conocida por estar asociada con la creatividad, proporcionando a la vez a los sujetos de estudio indicaciones verbales para pensar más creativamente.

Los investigadores encontraron que las personas que fueron capaces de aumentar más la actividad en la zona más frontal del cerebro, denominada corteza frontopolar, fueron también aquellas que aumentaron más la creatividad de las conexiones que formaron entre las ideas propuestas en un test de creatividad. Dado que el aumento de la actividad en la corteza frontopolar pareció impulsar de manera natural el pensamiento creativo, el equipo de investigación predijo que estimular la actividad en esta región cerebral facilitaría este impulso, permitiendo a las personas alcanzar mayores cotas creativas.

El uso de la tDCS centrada en la corteza frontopolar en dos tareas de creatividad permitió a los sujetos de prueba formar más conexiones creativas entre grupos de palabras, y también generar más asociaciones creativas entre ellas.

En otras investigaciones sobre la creatividad, ha sido común basarse en la idea de que la creatividad es un rasgo estático. En cambio, en la nueva investigación, el equipo de Green y Turkeltaub exploró la creatividad como un estado dinámico que puede cambiar rápidamente dentro de un individuo cuando este se esfuerza en usar su imaginación o “se pone el casco de pensar”, por así decirlo.

Los resultados de este estudio sugieren que proporcionar a las personas una “descarga” de tDCS puede mejorar el impulso natural de la creatividad en el cerebro.

En opinión de los autores del estudio, la nueva investigación proporciona pruebas novedosas de que la tDCS mejora el aumento consciente de creatividad suscitado por la intervención cognitiva, y extiende las fronteras conocidas de la mejora por tDCS hasta el razonamiento analógico, una forma de inteligencia creativa que es un potente motor para la innovación.

Sin embargo, tal como advierten Green y Turkeltaub, aunque los resultados obtenidos en el estudio son prometedores, es importante ser prudentes sobre las aplicaciones de la tDCS. Queda mucho por conocer respecto a cómo afecta esta a la función cerebral, y qué efectos secundarios nocivos podría haber a medio y largo plazo, o con usos muy frecuentes.

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