Ciencia de los Materiales
Material sintético que se vuelve más robusto con la actividad
Han creado un insólito material que se hace más fuerte cuando se le aplica tensión estructural dinámica repetidamente, de manera similar a como se fortalecen los huesos y músculos del cuerpo con la práctica habitual de ejercicio físico.
El trabajo desarrollado en el laboratorio de Pulickel Ajayan, profesor de ingeniería mecánica, ciencia de los materiales y química en la Universidad Rice, Estados Unidos, demuestra que mediante nanotubos de carbono es viable reforzar nanocompuestos hechos en buena parte de polímeros, y permitir así un mayor número de aplicaciones potenciales de estos materiales.
La clave que hace posible este refuerzo parece estar en la interfaz dinámica y compleja entre las nanoestructuras y los polímeros de esa clase de nanocompuestos.
Los investigadores también han constatado que la sola acción de comprimir el material no cambia sus propiedades. Sólo la tensión dinámica, deformándolo una y otra vez, lo refuerza.
Muchas ramas del sector de la construcción y del de la ingeniería podrán sin duda beneficiarse de esta nueva clase de materiales.
La peculiar cualidad que posee el nuevo material se puede describir de forma clara y sucinta con la analogía que propone Brent Carey, del equipo de investigación: En condiciones normales, mientras un hueso del cuerpo se ejercite de manera habitual, permanecerá fuerte. Por ejemplo, los huesos en el brazo que maneja la raqueta en un jugador de tenis son más densos. En esencia, esto es un efecto de adaptación del que se vale nuestro cuerpo para resistir las cargas que se le aplican.
Los materiales de la nueva clase resultan similares a los huesos en el sentido de que una carga estática en un compuesto de la nueva clase no produce cambios en éste; hay que aplicarle tensión dinámica para reforzarlo.