Astronomía
Sublimación de hielo de agua en el cometa que rozará Marte
El cometa Siding Spring, conocido formalmente como C/2013 A1, llegará a su punto de máxima cercanía a Marte el 19 de octubre de este año, pasando a sólo 138.000 kilómetros (86.000 millas); tan cerca que el gas y el polvo de los límites exteriores de la atmósfera del cometa, llamada coma o cabellera, interactuarán con la atmósfera del Planeta Rojo.
En comparación, el cometa que, hasta donde se sabe, es el que más se ha acercado a la Tierra, es el ahora extinto cometa Lexell, que el 1 de julio de 1770 pasó a unos 2,3 millones de kilómetros (1,4 millones de millas) de nuestro mundo, lo cual es tan solo unas seis veces la distancia que nos separa de la Luna. Durante su sobrevuelo a Marte, el cometa Siding Spring pasará a una distancia 16 veces menor.
Por lo que se sabe, es la primera vez que el cometa Siding Spring pasa por el sistema solar interior, y está experimentando su primer calentamiento fuerte por el Sol.
Una consecuencia de este calentamiento ya es claramente perceptible. En observaciones recientes hechas por el satélite astronómico Swift, de la NASA en colaboración con instituciones del Reino Unido e Italia, se aprecia ya cuán rápidamente y en qué extensión el hielo de agua del cometa está siendo afectado por dicho calor extra.
Las observaciones, analizadas por el equipo de Dennis Bodewits y Tony Farnham, de la Universidad de Maryland en la ciudad estadounidense de College Park, se hicieron cuando el cometa estaba a unos 368 millones de kilómetros del Sol (alrededor de 229 millones de millas).
En esta imagen compuesta del cometa Siding Spring, la luz solar reflejada por el polvo del cometa, que constituye la mayor parte de la luz en esta imagen, aparece en amarillo; el violeta muestra la luz ultravioleta producida por moléculas de hidroxilo, un fragmento molecular del agua descompuesta. (Imagen: NASA / Swift / D. Bodewits (UMD), DSS)
El telescopio óptico y ultravioleta del Swift usado para las observaciones no puede detectar moléculas de agua directamente, pero sí puede detectar la luz emitida por fragmentos de moléculas cuando la luz solar ultravioleta descompone las moléculas de agua, en concreto, átomos de hidrógeno y moléculas de hidroxilo.
Basándose en lo observado, los autores del análisis calculan que en el momento de las observaciones el cometa estaba liberando el equivalente de unos 49 litros de agua cada segundo. A este ritmo, y si el agua se mantuviera como tal, el cometa Siding Spring podría llenar una piscina olímpica en unas 14 horas.
Basándose en estos cálculos, el equipo ha llegado a la conclusión de que el núcleo, rico en hielo, del cometa Siding Spring tiene sólo 700 metros (2.300 pies) de diámetro aproximado.
Los cometas "nuevos" como el Siding Spring contienen algunos de los materiales más antiguos que los científicos pueden estudiar. La parte sólida de un cometa, su núcleo, es una mezcla de gases congelados y polvo que da pie a que a menudo se describa a tales cometas como "bolas de nieve sucia". Los cometas despiden gas y polvo cada vez que se aventuran lo suficientemente cerca del Sol.
Lo que provoca esta actividad es que el material del núcleo pasa de estado sólido a gaseoso, un proceso llamado sublimación. A medida que el cometa se acerca al Sol y se calienta, el núcleo despide diferentes gases que llevan consigo grandes cantidades de polvo que reflejan la luz solar y hacen brillar al cometa.
Los científicos han establecido que este cometa no supone ningún peligro para las naves espaciales en órbita alrededor de Marte. Estas naves serán usadas como flota provisional de observación del cometa para aprovechar esta oportunidad sin precedentes.