Astronáutica
Gran Enciclopedia de la Astronáutica (366): Angulo de Ataque
Angulo de Ataque
Astronáutica
Durante el ascenso de un cohete, éste sigue una trayectoria concreta, la cual se ha optimizado para salir lo antes posible de la atmósfera, donde el rozamiento es máximo. En este sentido, el ángulo de ataque sería el ángulo que forma el eje longitudinal del vector con respecto a la dirección del aire que atraviesa.
Debido a la alta velocidad impartida por su sistema de propulsión, un cohete debe tener una forma muy aerodinámica, ya que de otra forma, las fuerzas encontradas podrían destruirlo. Normalmente, un vehículo equipado con una ojiva penetra con agilidad el aire, y su estructura puede soportar las fuerzas que actúan sobre él, distribuyéndose a lo largo de su cuerpo. Aquí es donde el ángulo de ataque es importante. Si es demasiado pronunciado, estas fuerzas pueden desestabilizar el cohete. Por eso, el sistema de control vigila constantemente la inclinación durante la ruta de ascenso, asegurando que la trayectoria se mantenga bajo límites seguros. Pero en ocasiones se producen ráfagas de viento inesperadas, que si son muy fuertes, pueden empujar al cohete y desestabilizarlo, variando su ángulo de ataque de forma involuntaria. El sistema de control debe detectar esto y retornarlo a los niveles adecuados para evitar que las fuerzas crezcan de forma alarmante.
Cuando en pleno ascenso un vector sufre un problema de guiado o de propulsión, puede dejar de ascender correctamente e inclinarse demasiado antes de empezar a caer. En ese momento, el ángulo de ataque se hace irresistible y la estructura del cohete falla, estallando.
Ángulos de ataque incorrectos pueden causar también rotaciones imprevistas y rápidas en el vehículo, que pueden desembocar en una pérdida de control total.