Medicina
Medir constantes vitales mirando el rostro de la persona
Unos investigadores están desarrollando un sistema de gran precisión y que no requiere el contacto físico, para monitorizar mediante una cámara de video los signos vitales observando solo las caras de los pacientes. Este tipo de técnica no es nuevo, pero el equipo de Mayank Kumar, Ashok Veeraraghavan y Ashutosh Sabharwal, de la Universidad Rice, en Houston, Texas, Estados Unidos, está haciendo que funcione bajo condiciones que hasta ahora habían dificultado la labor a sistemas anteriores.
La versión de la Universidad Rice, DistancePPG, puede medir el pulso y la respiración de un paciente sin requerir analizar nada más que los cambios en el color de su piel a lo largo de un periodo de tiempo. Allí donde otros sistemas similares que utilizan cámaras se han visto dificultados por problemas de luz escasa, tonos de piel oscuros y movimientos corporales, DistancePPG emplea algoritmos para corregir tales variables.
El nuevo sistema se creó con la esperanza de permitir a los médicos diagnosticar a pacientes a distancia, lo que sería de gran utilidad en zonas muy alejadas de cualquier núcleo urbano y de difícil acceso.
El sistema también puede ser particularmente útil en la vigilancia de bebés nacidos prematuramente para quienes afianzar en su cuerpo ciertos dispositivos de medición podría resultar problemático e incluso peligroso (por ejemplo por enrollarse accidentalmente en el cuello cables de un electrocardiógrafo).
Los médicos pueden monitorizar los signos vitales de sus pacientes a través de video, analizando cambios sutiles en el color de la piel. Un nuevo software desarrollado por ingenieros de la Universidad Rice mejora la técnica al centrarse en ciertas regiones de la cara para ayudar a compensar los diferentes tonos de la piel, cambios en la iluminación y el movimiento. (Foto: Mayank Kumar / Rice University)
La tecnología en la que se basa el sistema DistancePPG es relativamente común, y buena parte del trabajo innovador radica en el software.
El equipo de Kumar espera que el software se acabe instalando en teléfonos móviles, tabletas y ordenadores, de manera que la gente pueda medir de forma fiable sus propios signos vitales dónde y cuándo quiera.