Internet pone los micro créditos al alcance de familias y empresas

Las familias, empresarios y PYMES cada vez tienen más difícil el acceso al crédito por los cauces habituales hasta ahora. Las entidades bancarias han reducido de manera drástica el flujo de líquido que hacían llegar a la sociedad, y eso se puede comprobar día a día. Las condiciones que plantean para conceder crédito se han endurecido hasta límites que podrían parecernos insospechados en otras épocas, frustrando de esta manera los planes, proyectos e ilusiones de familias y de empresas.

Ante este panorama, cada vez es mayor el número de personas que recurren a los micro créditos. Se trata de una solución ágil, rápida y flexible, que pone el efectivo en manos del interesado en un tiempo récord. Para solicitarlos, no es necesario contratar ningún servicio bancario adicional. Una de las grandes ventajas que ofrecen es que se pueden tramitar completamente a través de Internet. De esta manera, estos préstamos online con buenas condiciones están al alcance de absolutamente cualquier persona. Tan solo hay que ser mayor de edad, y realizar la consulta online.

Las entidades como SolCredito vienen a ocupar el espacio que los bancos y cajas de ahorro han dejado desierto. El cliente es el que decide qué cantidad quiere recibir en préstamo, así como la cuota mensual que pagará para devolverlo. Al hacerlo a través de Internet, fijando esos dos criterios, podrá comprobar de manera instantánea los intereses a pagar, el tiempo necesario para la devolución completa del crédito y todos los detalles referentes al mismo. La transacción es transparente al cien por cien, y las condiciones son muy provechosas, tratándose de cantidades muy pequeñas.

Los micro créditos son una manera muy ágil de no tener que pasar por el banco y conseguir avalistas para pequeños gastos. Un imprevisto, como puede ser la reparación del coche o una reforma urgente en casa; o una mejora en la salud, e incluso algún pequeño capricho, como unas vacaciones, un viaje o una escapada de fin de semana son algunas de las situaciones en las que se puede y se suele recurrir a esta modalidad crediticia. Para llegar a fin de mes en una situación puntual o para hacer frente a un gasto con el que no se contaba, este tipo de productos financieros son ideales: transparentes y rápidos. Desde que se realiza la petición de crédito hasta que ésta es aprobada, no transcurre mucho tiempo. En tan solo una hora, se puede disponer del efectivo en la cuenta corriente que se indique en la página web. Sin gastos extra ni comisiones adicionales por la concesión del pequeño crédito, resulta una solución cada vez más popular.