Ciencia de los Materiales
Catalizador barato que puede reducir drásticamente el precio del hidrógeno en automóviles propulsados por él
Unos investigadores que buscan convertir al hidrógeno en un combustible menos caro para automóviles han mejorado un catalizador barato, basado en el bisulfito de molibdeno, con el propósito de sustituir el platino, un elemento escaso con un precio astronómico de unos 900 dólares por onza (una onza son 28,35 gramos).
Los cambios promovidos por los investigadores elevan al catalizador de bisulfito de molibdeno, un material abundante, y por debajo de los 2 dólares por onza, de peso wélter en el campo de los catalizadores de energía (dicho llanamente, un vago perezoso que nunca valió para mucho), a posible contendiente en el campeonato de los pesos pesados.
La versión mejorada ya ha liberado cuatro veces la cantidad de hidrógeno que el catalizador de bisulfito de molibdeno haya conseguido producir jamás a partir de agua. En opinión de Stan Chou, de los Laboratorios Nacionales estadounidenses de Sandía (SNL), uno de los autores de este trabajo de investigación y desarrollo, esto es solo el principio, y el catalizador experimentará nuevas y espectaculares mejoras con el paso del tiempo.
Un beneficio adicional es que la acción del catalizador puede ser desencadenada por la luz solar, una propiedad que podría acabar proporcionando a los usuarios un medio de asegurarse combustible de hidrógeno sin depender de la red eléctrica.
El combustible de hidrógeno es deseable porque, a diferencia de la gasolina, no libera carbono en la atmósfera cuando se quema. La combustión del hidrógeno con el oxígeno produce un escape compuesto únicamente por agua.