Computación
Aplicación para iPhone e iPad que permite identificar especies vegetales
No todos los niños pueden soñar con una aplicación para smartphones (teléfonos inteligentes) y ver cómo se hace realidad. Pero eso es lo que ocurrió cuando William Belhumeur, un niño de ocho años de edad, sugirió a su padre desarrollar una aplicación que identificara a las plantas usando tecnología de reconocimiento visual.
Como profesor de ciencias de la computación en la escuela de ingeniería y director del Laboratorio para el Estudio de la Apariencia Visual, en la Universidad de Columbia, Peter Belhumeur ha trabajado con software de reconocimiento facial desde mediados de la década de 1990. Ante la propuesta de su hijo, rápidamente se dio cuenta de que los mismos algoritmos que pueden procesar la curva de una ceja o el ángulo de un pómulo podrían aplicarse a la forma de una hoja.
Tal como reconoce Belhumeur, para diseñar clasificadores que determinen si la persona que aparece en una foto es un hombre o una mujer, se utilizan en buena parte la misma clase de matemáticas y la misma clase de tecnología necesarias para diseñar clasificadores que determinen si una hoja es de arce azucarero o de arce plateado.
Con la ayuda de David Jacobs, científico de la computación en la Universidad de Maryland, y John Kress, botánico y conservador en el Instituto Smithsoniano, Belhumeur desarrolló LeafSnap, una guía de campo electrónica que ya está disponible para iPhone e iPad, y que lo estará para teléfonos Android a finales de este año. Es lo bastante fácil de usar como para que la pueda manejar un niño, pero también ofrece funciones útiles para los botánicos.
El equipo de investigación comenzó fotografiando hojas de la gran biblioteca del Instituto Smithsoniano. Pero pronto se dieron cuenta de que una aplicación viable tendría que poder reconocer las hojas en la naturaleza, y no sólo los especímenes de museo. Así que un grupo de voluntarios, reclutados de entre los alumnos de Belhumeur, fotografió con sus iPhones miles de hojas de vegetales de Central Park, llegando a contabilizarse hasta 50 muestras de cada una de las 145 especies de ese parque.