Química
Uso eficiente de gas de hulla en células de combustible gracias a electrodos autolimpiables
Usando nanopartículas de óxido de bario, unos investigadores han desarrollado una técnica de autolimpieza que podría permitir alimentar directamente a las células de combustible de óxido sólido con gas de hulla a temperaturas de operación tan bajas como 750 grados Celsius. La técnica podría proporcionar una alternativa más limpia y eficiente a las centrales eléctricas convencionales que generan electricidad a partir del carbón.
Las células de combustible de óxido sólido pueden operar con una gran variedad de combustibles, y usar directamente los gases de hidrocarburos.
Esas células de combustible se basan en ánodos hechos de níquel y un material cerámico especial. Sin embargo, hasta ahora, algunos combustibles, como el gas de hulla o el propano, podían inutilizar rápidamente estos ánodos, obstruyéndolos con depósitos de carbón, especialmente a temperaturas de operación bajas.
A fin de contrarrestar este problema, el equipo de Mingfei Liu, profesor de la Escuela de Ciencia e Ingeniería de los Materiales del Instituto Tecnológico de Georgia, Estados Unidos, ha desarrollado una técnica para recubrir los ánodos con nanoestructuras de óxido de bario. Las estructuras adsorben humedad y eso permite que se inicie una reacción química que usa agua para oxidar el carbono a medida que se forma, manteniendo limpia la superficie de los electrodos de níquel, incluso cuando se usan combustibles de carbón a bajas temperaturas.
A la postre, ésta podría ser la forma más limpia, eficiente y rentable de generar electricidad a partir del carbón, tal como indica Liu.