Paleontología
Los pigmentos de animales de hace más de cien millones de años
Por vez primera, se ha logrado reconocer huellas químicas de pigmentos en fósiles de pájaro, pez y calamar, de hasta más de 100 millones de años de antigüedad.
El equipo internacional de científicos que lo ha conseguido, dirigido desde la Universidad de Manchester, ha podido demostrar una notable relación entre el cobre y el pigmento de plumas y otros tejidos blandos excepcionalmente conservados.
Los resultados abarcan especies importantes como el ave con pico más antigua encontrada hasta ahora, el Confuciusornis sanctus de hace 120 millones de años, y también el Gansus yumenensis de hace 110 millones de años, el cual se parece al somorgujo moderno y representa el ejemplo más antiguo de ave anatómicamente moderna.
El color ha desempeñado un papel clave en bastantes de los procesos de la evolución por selección natural que han guiado a la vida en la Tierra desde tiempos remotos.
El pigmento es el componente más crítico del color que adquiere un tejido. El equipo de Roy Wogelius, Phil Manning y Uwe Bergmann mapeó la presencia de pigmentos en los fósiles, desvelando los patrones originales.
Lo descubierto respalda la idea de que es viable analizar la química de los pigmentos antiguos y que hacerlo puede ser la clave para alcanzar el objetivo final de descubrir la paleta de colores de las formas de vida del pasado remoto, desde aves extintas hasta dinosaurios y muchas más.
El singular logro científico de Wogelius y sus colaboradores puede ahora hacer posible que los paleontólogos reconstruyan los patrones de color de animales extintos, así como facilitar un conocimiento más profundo de cómo se conservan los compuestos biológicos en ambientes específicos con el transcurso de un largo periodo de tiempo.
Esto a su vez podría conducir a un conocimiento mucho mayor de los hábitos alimentarios de criaturas extintas y los entornos que ocuparon, además de aportar datos esclarecedores sobre la evolución de los pigmentos en las especies modernas.