Astroquímica
Los "ladrillos" de la vida que también pueden formarse en el espacio
En 2014, la sonda espacial Rosetta alcanzó un cometa que está orbitando en nuestro sistema solar. Un pequeño vehículo de aterrizaje detectó la presencia de glicina en el cometa, un descubrimiento inesperado dado que la glicina es un aminoácido. Los aminoácidos constituyen la base de las proteínas, y son un elemento esencial para toda la vida en la Tierra. Pero ¿cómo acabaron estando presentes estos aminoácidos en nuestro planeta?
El descubrimiento de glicina en el cometa sugiere que los aminoácidos se pueden formar en el espacio. Parece probable que los meteoritos sean el vehículo mediante el cual esas "factorías" químicas cósmicas enriquecen el acervo químico de mundos en los que aparece vida.
El equipo de Daniël Paardekooper, de la Universidad de Leiden en los Países Bajos, montó un experimento de laboratorio para estudiar esta hipótesis.
Se tuvieron en cuenta específicamente las condiciones que son comunes en las nebulosas oscuras. Las nebulosas son nubes de gas, plasma y partículas de materia fría que se producen en todas las galaxias. Después de millones de años, se forman cortezas de hielo en esas partículas. El hielo no solo consiste en agua, sino también en otros compuestos helados, como metano y metanol. Estas moléculas pueden descomponerse si son irradiadas por partículas de luz de alta energía, y de estas hay muchas en el espacio. Una vez se han descompuesto, las sustancias resultantes reaccionan entre sí y forman moléculas nuevas, más grandes y más complejas.
Los experimentos realizados por el equipo de Paardekooper muestran que las reacciones químicas entre partículas separadas pueden efectivamente tener lugar en superficies heladas, comparables a las que existen sobre algunas de las partículas sólidas que existen en las nebulosas oscuras gracias a las características especiales que estas poseen. Paardekooper y sus colaboradores pudieron producir grasas y azúcares en este montaje experimental. Ahora resulta plausible que se puedan originar aminoácidos incluso más complejos en las partículas de polvo heladas, aunque en la investigación cuyos resultados se han presentado ahora no se ha abordado dicha cuestión, que será sin duda tema de otras futuras.