¿Dónde ver las Perseidas?

La Federación de Asociaciones Astronómicas de España ha organizado actividades en diferentes puntos del país para que todo aquel que quiera pueda ver uno de los eventos astronómicos más llamativos del año, como son las Perseidas o las lágrimas de San Lorenzo. Son   actividades para todo tipo de público, pues no hace falta telescopio para poder observarlas. Eso sí,  hay que alejarse de ciudades o pueblos que tengan contaminación lumínica y buscar un cielo oscuro. La Federación ha creado este enlace, http://federacionastronomica.es/actividades, para que pueda saber la asociación más cercana que le facilitará la observación de esta lluvia de estrellas.

La Luna estará en su fase creciente a primeras horas de la noche, su luz podría restar un poco de belleza a la lluvia, pero a partir de las dos de la madrugada del 12 de agosto el cielo  mostrará en todo su esplendor las Perseidas. Reciben su nombre porque los meteoros emergerán de la constelación de Perseo, en el horizonte noreste y parece que se dirigen en todas direcciones, es lo que en astronomía se denomina radiante, aunque en realidad es solo una sensación óptica.

A mediados de julio fue cuando la Tierra entró en los confines de una nube de desechos dejados por el cometa 109P/Swift-Tuttle. Meteoroides del tamaño del polvo atraviesan la atmósfera dejando ver las llamadas estrellas fugaces sobre el cielo nocturno. Aunque el máximo se produce de día en España, la noche del 11 y el 12 de agosto son las mejores para su observación.

Hay una guerra de cifras que van desde los 150 a los 500 meteoros por hora; sea una u otra cantidad, el espectáculo está garantizado. Las  magníficas noches estivales invitan a la contemplación del cielo nocturno estrellado y el día 12 lo surcarán cientos de estrellas fugaces dejando su efímero rastro, unos instantes para el deleite de los observadores. En estos días previos, incluso, se han producido varios bólidos (meteoros excepcionalmente brillantes) que han surcado el cielo de La Mancha y de las provincias andaluzas de Granada y Jaén.

Los astrónomos estadounidenses Lewis Swift y Horace Tuttle, trabajando independientemente, descubrieron el cometa en 1862 y observaron la oleada del filamento el 11 de agosto. Tres años después, Giovanni Schiaparelli, famoso por los "canales" de Marte, se dio cuenta que el cometa era el origen de los meteoros Perseidas. Schiaparelli entendió que el cometa podría pasar cerca de la Tierra. La idea de que cometas y asteroides pueden amenazar nuestro planeta no fue ampliamente aceptada hasta la década de los años ochenta. Más tarde, los astrónomos empezaron a preocuparse. El cometa Swift-Tuttle es grande, más o menos del mismo tamaño del asteroide que hizo desaparecer a los dinosaurios hace 65 millones de años. En 1992, parecía que el cometa Swift-Tuttle podría chocar con la Tierra en el año 2126. Nuevos datos y cálculos comprueban que no existe peligro de una colisión, al menos durante un milenio, o probablemente muchos más. Con esta tranquilidad, solo queda hacernos con una tumbona, saco de dormir o manta para acercarnos al campo o en la playa con los pies apuntando al noreste, prepáranos una cena campestre y disponernos a disfrutar del cielo nocturno, en una de sus noches más mágicas del año. (Fuente: Federación de Asociaciones Astronómicas de España)