Ingeniería
Hacia un innovador taxi urbano con módulo de automóvil y módulo de aeronave
Cuando hay que hacer un trayecto urbano urgente e inaplazable, el temor para mucha gente es toparse con un embotellamiento de tráfico. Cuando sucede algo así, poder salir volando, literalmente, sería la solución perfecta. Esto, que hasta ahora era exclusivo de la ciencia-ficción, parece que se convertirá en una realidad de la mano de las empresas Airbus e Italdesign, que han aunado esfuerzos para desarrollar una especie de taxi autopilotado con capacidad aérea además de terrestre.
Se considera que este singular vehículo, llamado Pop.Up, es el primer vehículo que se ha diseñado de carácter modular, totalmente eléctrico y sin emisiones contaminantes, pensado para mitigar las congestiones de tráfico.
El vehículo consta de tres componentes principales: una cápsula de pasajeros, un módulo terrestre alimentado por baterías, y un módulo aéreo impulsado por ocho rotores eléctricos.
El modus operandi es simple: los pasajeros planean su viaje y lo reservan a través de una aplicación. El sistema sugiere automáticamente el mejor modo de transporte en función de los detalles del viaje y de las preferencias de los pasajeros. La cápsula se convierte en una cabina de automóvil simplemente acoplándose al módulo terrestre. En el modo terrestre, Pop.Up es un vehículo autoconducido para circular por ciudad y energizado exclusivamente por electricidad. Pero cuando las carreteras están saturadas, la cápsula se desconecta del módulo terrestre y es transportada por el módulo aéreo, convirtiéndose así en un vehículo aéreo urbano autopilotado que ya no necesita las carreteras.
Los tres componentes principales del híbrido modular de aeronave y automóvil. De arriba abajo: módulo aéreo, cápsula para pasajeros, y módulo terrestre. (Imagen: Airbus Group)
Una vez los pasajeros alcanzan su destino final, todos los componentes de Pop.Up regresan, de manera autónoma y ya sin prisa, a una estación de recarga, donde esperaran a sus próximos clientes.
Los creadores de este vehículo híbrido han tenido muy en cuenta su accesibilidad por parte de un amplio público, y por ello lo han diseñado para que pueda ser una parte más de la red de transporte público de una ciudad, facilitando los transbordos con otros medios de transporte e incluso para integrarse en sistemas futuros. Por ejemplo, al respecto de esto último, la cápsula de pasajeros podría ser adaptada fácilmente para ser compatible con el sistema Hyperloop, que consiste en cápsulas circulando por el interior de un larguísimo tubo con muy poco aire, y que, si todo sale bien, permitirá trasladar en ellas pasajeros entre ciudades distantes a velocidades de hasta unos 1.200 kilómetros por hora, logrando así trayectos más cortos que los realizados en trenes de alta velocidad e incluso que bastantes vuelos en avión.
Airbus ya está trabajando en modelos de demostración reales del Pop.Up, que volarán dentro de un par de años, para explorar y perfeccionar las tecnologías que se precisan.