Artículo, del blog Los Viajeros Estelares, que recomendamos por su interés.
Sequías, hambre, lluvias, nevadas... Como consecuencia de la colosal erupción del volcán Tambora, el verano de 1816 fue extremadamente frío y lluvioso.
Las desastrosas pérdidas que este trastorno climático causó en la agricultura llevaron al hambre a Europa, un continente ya de por sí arrasado por las recientemente concluidas guerras napoleónicas.
Estados Unidos, China y la India también se vieron golpeados de forma devastadora por un clima hostil que afectó gravemente a la agricultura.
Todo ello bajo unos cielos extraños, con puestas y salidas del Sol que se describieron como espectaculares, teñidas de tonalidades naranjas, rojas, púrpuras e incluso rosas...
El artículo, del blog Los Viajeros Estelares, se puede leer
aquí.