Astronáutica
La Shenzhou-8 regresa a la Tierra
Con la conclusión de la misión de la cápsula Shenzhou-8, China puede dar luz verde a los preparativos finales para el envío de astronautas a su estación espacial Tiangong-1. La SZ-8 se separó de esta última sin novedad y regresó a la Tierra normalmente, aterrizando de forma segura en la Mongolia Interior.
Una vez abandonado el complejo orbital, la nave maniobró ligeramente el 17 de noviembre, situándose para frenar e iniciar el descenso. En primer lugar se separó el módulo orbital cilíndrico (10:45 UTC), que quedó en el espacio. Este último no está equipado con paneles solares, como en anteriores misiones, de modo que no continuará operando por su cuenta. Muy poco después el módulo de servicio accionó sus motores para frenar la velocidad orbital, permitiendo comenzar el reingreso atmosférico. Este se produjo minutos antes de la separación del citado módulo de servicio (11:07 UTC), lo que permitió que la cápsula pudiera orientarse y situar su escudo térmico en la dirección de marcha.
Tras cruzar la atmósfera, la nave abrió los paracaídas y acabó aterrizando, en plena noche, a las 11:32 UTC. Las fuerzas de rescate contemplaron la fase final del vuelo y el propio aterrizaje, antes de acercarse al vehículo, que quedó tumbado sobre su lateral. Los especialistas abrieron la escotilla frontal, desde donde uno de ellos dio la mano a uno de los dos maniquíes equipados con trajes espaciales. Después, se colocó a la cápsula en posición normal, y un entramado metálico a su alrededor para facilitar la extracción de los experimentos. Por fin, la nave sería cargada y trasladada.
La demostración de que la SZ puede acoplarse a la Tiangong-1 y efectuar una misión completa, es una buena noticia para las autoridades chinas, que en 2012 enviarán una o dos tripulaciones a la estación.![[swf object]](images/blank.gif)


