Relación entre salud cardiovascular a mediana edad y salud mental en la vejez

Las mujeres que gozan de una excelente salud cardiovascular en su mediana edad, tienen un riesgo de desarrollar una demencia asociada a la vejez cuando son ancianas que es casi un 90 por ciento inferior al de aquellas mujeres cuya salud cardiovascular es la que constituye el promedio en la población femenina.

Así lo indican los resultados de una investigación reciente, llevada a cabo por el equipo de Ingmar Skoog, de la Universidad de Gotemburgo en Suecia, y Helena Hörder, de la Academia Sahlgrenska en la misma ciudad sueca.

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El estudio se basa en información de 191 mujeres que fueron sometidas a una prueba de estado físico en una bicicleta estática cuando tenían una media de 50 años de edad. Las mujeres pedalearon hasta su máximo de resistencia, en cuyo punto se registraron los resultados de sus esfuerzos en la bicicleta.

Con arreglo a sus resultados, cada una de las mujeres fue clasificada en uno de tres grupos de estado de salud: bueno (40 mujeres), mediano (92 mujeres) y malo (50 mujeres). Veinte de ellas en la categoría de nivel bajo tuvieron que interrumpir la prueba debido a un aumento problemático en la presión sanguínea u otras alteraciones cardiovasculares.

Durante los siguientes 44 años, las mujeres fueron examinadas en seis ocasiones, en busca de síntomas de demencias asociadas a la vejez. De las 191 mujeres, 44 desarrollaron esta clase de enfermedad.

Helena Hörder. (Foto: Pernilla Lundgren/Södra Älvsborgs Sjukhus)

En el grupo que logró los mejores resultados en la prueba de bicicleta estática, un 5 por ciento desarrolló demencia. En el grupo de estado físico mediano, la proporción fue del 25 por ciento. Y en el grupo de estado físico bajo, llegó al 32 por ciento. De las mujeres que tuvieron que interrumpir la prueba, el 45 por ciento desarrollaron alguna demencia.

Las mujeres que cuando fueron de mediana edad gozaron de un buen estado cardiovascular y que pese a ello desarrollaron demencia, lo hicieron en promedio 11 años después de aquellas que estaban en el grupo de estado físico medio, o sea a la edad de 90 años en vez de a los 79 años.

Conviene matizar que los resultados del estudio no demuestran una relación de causa-efecto entre una buena salud cardiovascular en la mediana edad y el riesgo de demencia en la vejez. Pero, por otro lado, claramente sí hay algún tipo de relación entre ambos estados de salud. Habrá que investigar más para esclarecer en qué consiste exactamente esa relación.

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