Ingeniería
Un paso más hacia la memoria optomecánica
Una nueva investigación demuestra que los resonadores nanomecánicos pueden trabajar a amplitudes mucho más altas de lo que se pensaba.
Los resultados de este estudio constituyen un avance importante en la optomecánica, una especialidad en la cual se usa la fuerza de la luz para controlar dispositivos mecánicos. Lo descubierto en la nueva investigación podría conducir a avances decisivos en tecnologías para almacenamiento de datos, comunicaciones y sensores.
En este contexto de la optomecánica, se denomina amplitud al rango de vibración. Ha sido difícil lograr amplitudes altas en los sistemas mecánicos nanométricos tradicionales, porque reducir las dimensiones de un resonador acostumbra a limitar cuánto puede moverse.
El equipo de Mahmood Bagheri y Hong Tang, de la Universidad de Yale, en Estados Unidos, ha mostrado un modo de superar las limitaciones de los sistemas convencionales.
El principio de funcionamiento es similar a la técnica de enfriamiento por láser usada en la física atómica. Se puede controlar el movimiento de una estructura mecánica, amplificar o reducir sus vibraciones, controlando únicamente la longitud de onda de la luz láser que se le aplique.
Los investigadores también han demostrado que una diminuta estructura de silicio dentro de un sistema optomecánico puede almacenar información eficazmente, y sin requerir de un suministro eléctrico constante, actuando así como un dispositivo de memoria mecánico.
Entre otras ventajas, los dispositivos de memoria optomecánica pueden soportar ambientes más duros que los dispositivos de memoria electrónicos o magnéticos, sin perder sus datos. Las futuras tecnologías que utilicen resonadores optomecánicos de alta amplitud podrían ser menos sensibles a factores del entorno como por ejemplo las variaciones en la temperatura y la radiación. Al mismo tiempo, los resonadores de alta amplitud podrían permitir crear dispositivos de medición más precisos y robustos.



