Astroquímica
La misteriosa química interestelar
Conocemos la química de la Tierra y otros astros cercanos, e incluso podemos deducir la de astros distantes a partir del análisis espectroscópico de su luz. Pero la química que tiene lugar en las frías y oscuras nubes de gas y polvo del medio interestelar encierra aún muchas incógnitas. Un nuevo estudio puede haber desentrañado algunas.
Un reciente trabajo efectuado por astroquímicos de la Universidad Heriot-Watt en Edimburgo, Reino Unido, aporta datos esclarecedores sobre esta parte oscura del universo, los cuales muestran el papel fundamental que pueden desempeñar las partículas de polvo helado en la formación de un tipo de molécula orgánica que podría ser precursora de los pilares de la vida.
Según algunas estimaciones, las moléculas constituyen menos del 1 por ciento de la materia del universo, pero a pesar de su escasez pueden influir de manera significativa en la evolución de estrellas y sistemas planetarios.
Los científicos sospechan, sobre la base de observaciones en infrarrojo, que muchas de las partículas de polvo en las nubes interestelares están cubiertas de una capa de hielo. El hielo actúa como refrigerante durante el proceso de formación de las estrellas, y su influencia tiende a promover la creación de estrellas más pequeñas y más longevas, como nuestro Sol. Estas estrellas, al mantenerse estables durante un largo periodo, dan más tiempo a los planetas para evolucionar, en comparación con el que dan las estrellas de mayor masa y vida breve.
Además de ralentizar la evolución estelar, las partículas de polvo helado también pueden influir en la química orgánica interestelar, acelerando reacciones químicas o protegiendo a las moléculas de los rayos cósmicos de alta energía.
Es este comportamiento químico catalizador ostentado por el polvo interestelar lo que el equipo del astroquímico Martin McCoustra está investigando. Usando superficies de agua congelada y sílice, los científicos crearon en el laboratorio modelos de granos de polvo, tanto desnudos como cubiertos de hielo, y luego los bombardearon con electrones de baja energía para imitar el efecto de los rayos cósmicos incidiendo en ellos.
Los investigadores buscaban específicamente el efecto de los rayos sobre el acetonitrilo, un compuesto orgánico simple que se ha observado en el medio interestelar.
Y comprobaron que, en las películas de acetonitrilo, los electrones entrantes rápidamente desplazaban a las moléculas, mientras que en el caso de las moléculas de acetonitrilo aisladas mediante superficies heladas, tenía lugar una reacción química.
Se cree que el acetonitrilo es un precursor de los aminoácidos, y el producto de la reacción, sobre el que los científicos todavía están trabajando para identificar con exactitud, probablemente es parte de un paso intermedio en el proceso que produce grandes moléculas orgánicas. El punto clave es que el agua resulta crucial para la reacción química, ya que ésta no se produce con el acetonitrilo puro.