Astronáutica
Lanzada la nave Dragon CRS-16
La compañía SpaceX lanzó el 5 de diciembre el vehículo Dragon CRS-16 con suministros para la estación espacial internacional. El despegue, desde Cabo Cañaveral, se realizó a las 18:16 UTC.
El cohete Falcon-9 v1.2 liberó a su carga normalmente, en una órbita baja. La Dragon abrió entonces sus paneles solares e inició las maniobras de transferencia hacia el complejo orbital. Su viaje de dos días deberá culminar con una captura mediante el brazo robótico Canadarm-2 y su unión a la estación el sábado. La Dragon transporta unas 2 toneladas y media de suministros, que incluyen equipos de investigación, recambios, y materiales para la tripulación.
Uno de los equipos que se instalarán a bordo de la estación será el GEDI (Global Ecosystem Dynamics Investigation), que proporcionará observaciones láser de alta calidad para estudiar los bosques y la topografía terrestre, Será instalado en el exterior del módulo japonés JEM.
Otro sistema que se ensayará es el llamado RRM3 (Robotic Refueling Mission-3), durante cuya operación se demostrará la transferencia y almacenamiento de metano líquido en microgravedad. Esta sustancia, que puede usarse como refrigerante o combustible, será útil en los futuros viajes a la Luna y Marte.
(Foto: NASA)
La misión de la Dragon transportó asimismo un cubesat de 6 unidades llamado TechEdSat 8 (Technical and Educational Satellite 8), propiedad de la NASA y de dos universidades estadounidenses. Ensayará el sistema Exo-Brake, para facilitar la recuperación de cargas desde el espacio. Junto al TechEdSat 8 viajó otro cubesat llamado UNITE (Undergraduate Nano Ionospheric Temperature Explorer), un 3U de 4 kg de peso de la University of Southern Indiana, que explorará la ionosfera.
La CRS-16 permanecerá junto a la estación hasta enero de 2019, cuando regresará a la Tierra con diversa carga que será recuperada en el océano.
En cuanto a la primera etapa del cohete Falcon-9, en esta ocasión no pudo ser recuperada de manera normal. Durante el descenso, uno de los elementos hidráulicos que controlan la dirección dejó de funcionar y se inició un giro del vehículo. Detectando lo ocurrido, el vehículo no se dirigió hacia tierra sino que continuó hacia el océano, donde, ya controlado el giro, “aterrizó” suavemente sobre el agua, donde quedó flotando de costado. SpaceX recuperará la etapa y cree que la podrá reutilizar para una futura misión de la compañía.