Salud
¿Ayuda El Cigarrillo Electrónico A Dejar De Fumar?
Dejar el tabaco es uno de los propósitos que cada año se hacen miles de personas en todo el mundo, gracias en gran medida al incremento de las campañas de salud que han surgido en los últimos años en esta área. La mayoría de los fumadores son conscientes de ello: fumar es nocivo. No obstante, la adicción que provoca el tabaco hace que este hábito sea difícilmente reducido o incluso eliminado por completo. Por eso, cada vez más personas recurren a soluciones como los cigarrillos electrónicos de Ivapeo, que buscan que los fumadores puedan ir dejando de fumar paulatinamente para convertirse en personas más saludables. Se trata además de un sistema que no ha dejado de mejorar, incorporando líquidos y dispositivos de gran calidad.
España: entre los países más fumadores de Europa
Hay quien dice que dejar de fumar es más fácil ahora que hace unas décadas. Cierto es que cada vez en más frecuente encontrar información sobre el consumo de tabaco, sobre las consecuencias que puede ocasionarnos o zonas en las que fumar no está permitido, por lo tanto, se reducen las posibilidades de realizar esta actividad. De hecho, según los datos que maneja Eurostat, en España ha descendido el consumo de tabaco en los últimos años. No obstante, quienes fuman saben que la concienciación es importante pero no proporciona una solución inmediata. Y por eso, esos mismos datos, aunque favorables, siguen siendo muy elevados y sitúan a nuestro país por encima de la media europea. Las cifras que maneja la Unión Europea, sitúan a los fumadores españoles por delante de ellas, y descienden cuando se habla del consumo de tabaco entre los más jóvenes. Los porcentajes descienden, en este colectivo, del 28% al 9%, situándose entre las más bajas de todo el territorio europeo; lo cual es sin duda muy alentador de cara al futuro y muestra el buen camino que pueden ir surcando los nuevos ciudadanos españoles.
¿Por qué sigue siendo difícil despegarnos del tabaco?
En momento de estrés, de insomnio, de dificultad… un cigarrillo genera una sensación tranquilizadora. Otras veces, el fumar se identifica no tanto con situaciones en las que anímicamente nos encontramos mal o al límite, sino con momentos muy concretos de nuestra cotidianeidad, a los que hemos asociado un cigarrillo. Un buen ejemplo es el momento del café, o la pausa que hacemos en el trabajo para airearnos. Eliminar el cigarrillo de esas situaciones, en las que, además, solemos fumar en grupo, es difícil y requiere de una fuerza de voluntad muy elevada. De ahí las dificultades para no echar mano de él.
Cigarrillo electrónico: ¿sí o no?
Sin embargo, del mismo modo que se ha ido avanzando en el terreno de la sensibilización, también han aumentado las alternativas y métodos dirigidos a dejar de fumar. El más conocido: el cigarrillo electrónico. Se trata también de un método controvertido ya que, dentro del ámbito de la salud, hay profesionales que no lo apoyan. No obstante, también los hay que sí y que defienden que este puede ser un buen método para ir reduciendo el consumo de nicotina. De hecho, algunos médicos han vinculado la aparición de los cigarrillos electrónicos con la reducción del consumo de tabaco en países como Reino Unido, en donde las tasas de consumo de tabaco han ido reduciéndose en los últimos años, llegando hoy en día a poco más del 15%. Así mismo, en este país la recomendación del cigarrillo electrónico en los últimos años ha sido la principal novedad.
De fumar a vapear: el cigarrillo electrónico
La preocupación por el consumo de tabaco se ha dejado notar hasta en el lenguaje que usamos para comunicarnos. Verbos como vapear o sustantivos como e-liquidos no formaban parte de nuestro vocabulario hace unos años. Así mismo, forman parte de esos nuevos métodos para atajar la adicción, poco a poco y de manera flexible. De hecho, entre las ventajas más destacables del vapeo se encuentran:
- La posibilidad de preparar autónomamente las mezclas: e ir reduciendo las dosis más nocivas para el organismo, sin necesidad de recurrir a profesionales. Los líquidos se componen por lo general de propilenglicol, etanol, glicerina vegetal y nicotina. La dosis de esta última puede irse reduciendo siendo siempre inferior a la de un cigarro de fumar.
- La gran cantidad y variedad de líquidos para vapear.
- La oferta de un amplio abanico de aparatos electrónicos, entre los que destacan los novedosos mod.
- La reducción de la cantidad de nicotina en cada dosis adaptándola a cada fumador:
- Favorecer a que el proceso sea más agradable también para nuestro círculo cercano (familia, amigos, compañeros de trabajo, etc.), ya que no tendrán que exponerse a fuerte humo que produce la carburación de un cigarrillo.
- La capacidad de reducir el coste que cada fumador dedica a fumar.
- Adiós al mal olor en la ropa y en los espacios que frecuentamos como la casa, el trabajo, el coche… alejando también a los más pequeños de ellos. El mal olor desaparecerá también de las zonas de nuestro cuerpo más expuestas al tabaco como son las manos, los dientes o la boca.