Astronáutica
Lanzados los satélites Eutelsat 5 West B y MEV-1
Rusia lanzó al espacio, el 9 de octubre, un cohete Proton-M/Briz-M con dos satélites comerciales a bordo. El vehículo despegó desde el cosmódromo de Baikonur a las 10:17 UTC, y supuso la colocación de la carga en una ruta de transferencia geoestacionaria.
Los pasajeros son un satélite de comunicaciones y un ingenio que prolongará la vida útil de otros. El primero es el Eutelsat 5 West B. Este satélite ha sido construido por la empresa estadounidense Northrop Grumman Innovation Systems sobre una plataforma GEOStar-2e. Tiene una masa de 2.740 kg y una carga útil de 35 repetidores en banda Ku proporcionada por Airbus Defence and Space. El satélite será colocado en la posición geoestacionaria 5 grados Oeste, desde donde ofrecerá, durante unos 15 años, servicios de video sobre Europa y el norte de África. También transporta un sistema EGNOS de mejora de señales GPS.
El segundo satélite es un vehículo innovador. Se llama MEV-1 (Mission Extension Vehicle-1), y consiste en un satélite capaz de acoplarse a otros en órbita geoestacionaria, proporcionándoles una nueva capacidad de maniobra, lo que prolongará su vida útil en el espacio. Ha sido construido por Northrop Grumman Innovation Systems sobre una plataforma GEOStar-3 equipada con propulsión eléctrica. Pesa 2.326 kg y tiene una vida útil de 15 años.
(Foto: ILS)
Una vez en el espacio, el MEV-1 viajará hacia el satélite de comunicaciones Intelsat-901, que le esperará en una “órbita cementerio” inclinada, algo por encima de la órbita geoestacionaria tradicional. El MEV se unirá a él, introduciendo un anclaje en su tobera, y permanecerá junto al Intelsat-901 durante 5 años. Eliminará la inclinación de su órbita y lo llevará hasta una nueva posición de trabajo. Dentro de 5 años, lo volverá a abandonar tras recolocarlo en la órbita cementerio, y se dirigirá hacia otro satélite cliente. Se espera que el MEV-2 vuele el año que viene a bordo de un cohete Ariane-5ECA, que se unirá a otro Intelsat.
El Intelsat-901 está bajo de reservas de combustible y en condiciones normales debería ser abandonado, pero sus sistemas están plenamente operativos. El MEV-1 permitirá que siga siendo productivo durante 5 años más (con una posible extensión de otros 2 años).