Astronáutica
Dos mujeres astronauta protagonizaron una salida extravehicular
La NASA decidió añadir una salida extravehicular (EVA) al programa de mantenimiento de la estación espacial internacional para resolver un problema en una de las unidades de carga y descarga del sistema de baterías externas, concretamente en el segmento P6.
Las operaciones de reparación, que incluirían la sustitución de la unidad BCDU correspondiente, fueron asignadas a las dos astronautas que actualmente se hallan en el complejo orbital, Christina Koch y Jessica Meir. Dado que esta sería la primera vez que dos mujeres llevaban a cabo una EVA simultáneamente (otras, incluida Koch, lo habían hecho con anterioridad, pero junto a compañeros masculinos), el acontecimiento llamó la atención de la prensa, hasta el punto que el presidente Trump efectuó una llamada a las astronautas para felicitarlas.
La EVA empezó incluso unos minutos antes de lo previsto, con una apertura de la escotilla exterior del módulo Quest a las 11:37 UTC del 18 de octubre. Las dos astronautas accedieron a una zona donde se almacenan recambios de algunas piezas y recogieron la nueva unidad BCDU, de unos 100 kg de peso, instalándola con posterioridad en su lugar. También se extrajo la unidad que había fallado y se la llevó a la esclusa para entrarla en la estación, donde será examinada y preparada para su envío a la Tierra.
Se efectuaron también tareas de documentación y otras operaciones de menos importancia, a cuya conclusión se procedió con el regreso al módulo Quest y al cierre de la escotilla (18:51 UTC). Sus compañeros las ayudaron después a despojarse de los voluminosos trajes espaciales y a guardar las herramientas utilizadas.
![[Img #57455]](https://noticiasdelaciencia.com/upload/images/10_2019/4287_koch_meir_all_woman_spacewalk2.jpg)
(Foto: NASA TV)
Tras esta EVA, Koch ha realizado su cuarta salida extravehicular en su carrera como astronauta, siendo la primera para Meir. Koch debía haber hecho una EVA con su compañera Anne McClain (esta se encuentra ya en la Tierra) hace unos meses, pero un problema en la disponibilidad de las tallas adecuadas de ciertas piezas de la escafandra obligó a retrasarla.
De hecho Koch y Meir ya debían realizar una EVA conjunta dentro de unos días, para reemplazar unas baterías, pero el problema en la unidad de carga y descarga propició la suspensión temporal de estas actividades hasta que otra EVA sustituyera la unidad BCDU afectada. Con ello se han recuperado entre 4 y 5 kilovatios de electricidad y pueden reanudarse los planes de cambio de baterías.



