Paleobotánica
El polen conservado explica la historia de las llanuras aluviales
Muchos de nosotros pensamos solo en el polen cuando llega la temporada de las alergias. Sin embargo, para científicos especializados en el estudio de los suelos, como Matthew Ricker, el polen puede ser una herramienta muy valiosa. Haciendo un seguimiento del polen fósil presente en el suelo, los científicos pueden mirar atrás en el tiempo para entender mejor el uso antiguo de la tierra y la dinámica del clima.
Por ejemplo, cuando los colonos europeos despejaron los bosques del este de los Estados Unidos y plantaron sus cultivos, el perfil del polen en el suelo cambió. El polen de ambrosía y de los pastos se hizo más común. En cambio, el polen de árbol se hizo más raro.
El estudio del polen fósil, no obstante, se ha visto restringido a relativamente pocos lugares, normalmente aquellos próximos a lagos y ciénagas. En un nuevo estudio, Ricker y sus colegas, de la universidad estatal de Carolina del Norte, indican que el polen fósil puede ser una herramienta útil en los suelos de las llanuras aluviales.
“Hemos demostrado que las llanuras aluviales pueden contener abundante polen conservado”, explica Ricker. “Por tanto, estos lugares pueden ser útiles a la hora de explorar el clima pasado y los usos antiguos de la tierra”.
El estudio también mostró que ciertas propiedades del suelo, como la concentración de materia orgánica, están correlacionadas positivamente con la abundancia de polen. Eso es importante porque la extracción de polen y su cuantificación son relativamente caras si se envía el material a un laboratorio comercial (incluso cintos de miles de dólares).
Llanura aluvial en el sudeste de Estados Unidos, donde se ha conservado polen para el estudio del uso pasado del suelo. (Foto: M.C. Ricker)
La nueva información permitirá a los científicos usar propiedades del suelo fáciles de medir para predecir si es probable que se encuentre polen conservado en capas de suelo específicas. Las propiedades del suelo que se correlacionan con la abundancia del polen incluyen a la concentración de materia orgánica, como ya se ha dicho, y a la proporción entre carbono y nitrógeno.
Para el estudio, los investigadores recogieron un total de 117 muestras de suelo. Los lugares de las que se extrajeron pertenecían a 18 localidades de Connecticut, Rhode Island y Massachusetts. Los investigadores midieron las diversas propiedades del suelo, como la materia orgánica, el tamaño de las partículas y el contenido de hierro.
El polen fósil puede descomponerse con el paso del tiempo en suelos con altos niveles de oxígeno. Uno de los problemas de trabajar en llanuras aluviales es que estos suelos están normalmente bien oxigenados, y eso puede provocar una mayor degradación del polen.
Los parajes muy húmedos, como lagos y ciénagas, son buenos sitios para encontrar polen conservado, ya que carecen de oxígeno, lo que limita su descomposición microbiana. Sin embargo, muchas áreas del mundo carecen de lagos o ciénagas. La alternativa, las llanuras aluviales, deberán ser pues utilizadas para la reconstrucción del clima y del uso de la tierra.
Incluso en las llanuras aluviales hasta el 40% de las capas de suelo no contienen polen, por eso hay que medir correctamente sus propiedades y así estimar la probabilidad de su presencia.