Miércoles, 22 de Octubre de 2025

Actualizada Miércoles, 22 de Octubre de 2025 a las 10:49:30 horas

Tienes activado un bloqueador de publicidad

Intentamos presentarte publicidad respectuosa con el lector, que además ayuda a mantener este medio de comunicación y ofrecerte información de calidad.

Por eso te pedimos que nos apoyes y desactives el bloqueador de anuncios. Gracias.

Continuar...

Redacción
Jueves, 23 de Abril de 2020
Medicina

Dolor muscular por el tratamiento contra el colesterol

Los pacientes que toman estatinas para reducir sus niveles de colesterol en la sangre a menudo se quejan de problemas musculares, típicamente dolor muscular. Pero la razón por la que esto ocurre aún no se ha resuelto. En un estudio reciente, Alexandra K. Kiemer y Jessica Hoppstädter de la Universidad de Saarland han identificado una posible relación causal. De acuerdo con los resultados de su trabajo, las estatinas causan una mayor producción de una proteína llamada 'GILZ' que perjudica la función de las células musculares. El estudio ha sido publicado en la revista The FASEB Journal.

 

Los medicamentos para reducir el colesterol, que se denominan comúnmente estatinas, son algunos de los que se recetan con más frecuencia en todo el mundo. En general, las estatinas son bien toleradas por los pacientes. Sin embargo, no es raro que algunos se quejen de dolor o debilidad muscular. "Según las cifras de los estudios de observación, se ha encontrado que los problemas musculares ocurren en un 5% a 29% de los casos. Los pacientes mayores y las mujeres parecen tener un mayor riesgo de desarrollar estos síntomas, pero también lo tienen los pacientes muy activos físicamente", explica Alexandra K. Kiemer, Profesora de Biología Farmacéutica de la Universidad de Saarland. En 2018, más de 6 millones de pacientes en Alemania fueron tratados con estatinas. Esto sugiere que los problemas musculares pueden estar afectando a varios cientos de miles de pacientes, potencialmente hasta 1,8 millones, solo en Alemania. La naturaleza precisa de los procesos corporales que inducen los síntomas del deterioro muscular aún no se ha caracterizado completamente.

 

Alexandra K. Kiemer y su grupo de investigación pueden haber identificado la causa real del dolor muscular que afecta a los pacientes que reciben estatinas. Creen que una proteína conocida como GILZ (glucocorticoid-induced leucine zipper) es la responsable. A lo largo de los años, su grupo de investigación ha realizado numerosos estudios experimentales sobre esta proteína en particular. "La función principal de GILZ es suprimir los procesos inflamatorios en el cuerpo. Las estatinas previenen las enfermedades cardiovasculares no solo reduciendo los niveles de colesterol en la sangre, sino también reduciendo la inflamación vascular. Por eso pensamos que podría haber una conexión entre las estatinas y la GILZ. Nuestros datos indican que la presencia de GILZ en el cuerpo puede tener efectos tanto positivos como negativos", dice Kiemer. Basándose en esta conjetura inicial de que podría haber un vínculo entre la proteína GILZ y las estatinas y sus efectos secundarios, los investigadores farmacéuticos comenzaron a analizar numerosos conjuntos de datos extraídos de las bases de datos de investigación disponibles en todo el mundo.

 

[Img #59965]

 

Alexandra K. Kiemer y su grupo de investigación han establecido un vínculo entre las estatinas, los problemas musculares asociados a las estatinas y la proteína GILZ. (Foto: Iris Maurer)

 

Evaluaron los datos en términos de si las estatinas influían en la producción de GILZ en el cuerpo. Tras confirmar sus sospechas originales, los investigadores pudieron corroborar su hipótesis realizando una serie de experimentos con células vivas. "Las estatinas causan un aumento en la producción celular de la proteína GILZ. Esto, sin embargo, conduce a un deterioro de la función muscular, porque el aumento de la producción de GILZ resulta en una mayor tasa de muerte de las células musculares. Además, se inhibe la formación de fibras musculares", dice Alexandra K. Kiemer. El equipo de investigación intentó entonces apagar la proteína GILZ en las células vivas y observar qué efecto tenían entonces las estatinas. "Cuando observamos lo que sucede cuando se administran estatinas a las células musculares o a fibras musculares enteras en las que se ha desactivado genéticamente la proteína GILZ, el daño que se observó anteriormente está ahora casi completamente ausente", dice Kiemer.

 

También parece haber indicios de que las personas que realizan una cantidad significativa de actividad física sufren problemas musculares cuando se les recetan estatinas. Además, las estatinas parecen perjudicar el éxito de los programas de entrenamiento físico. Por consiguiente, los investigadores farmacéuticos dirigidos por Alexandra K. Kiemer están planificando un nuevo estudio que se realizará en colaboración con la médica especialista en medicina deportiva Anne Hecksteden del grupo de investigación dirigido por el profesor Tim Meyer de la Universidad del Sarre. "Tenemos algunas pruebas de que existe un vínculo entre las estatinas, la actividad física y la proteína GILZ, y nuestro plan es arrojar más luz sobre cómo estos factores interactúan entre sí", dice el profesor Kiemer. (Fuente: NCYT Amazings)

Copyright © 1996-2022 Amazings® / NCYT® | (Noticiasdelaciencia.com / Amazings.com). Todos los derechos reservados.

Depósito Legal B-47398-2009, ISSN 2013-6714 - Amazings y NCYT son marcas registradas. Noticiasdelaciencia.com y Amazings.com son las webs oficiales de Amazings.

Todos los textos y gráficos son propiedad de sus autores. La reproducción está permitida solo si se incluye el crédito de la fuente (NCYT Amazings) y un enlace dofollow hacia la noticia original.

Excepto cuando se indique lo contrario, la traducción, la adaptación y la elaboración de texto adicional de este artículo han sido realizadas por el equipo de Amazings® / NCYT®.

Con tu cuenta registrada

Escribe tu correo y te enviaremos un enlace para que escribas una nueva contraseña.