Astrobiología
Capacidad para detectar vida alrededor de estrellas enanas blancas
La próxima generación de telescopios de muy alta resolución, emplazados en la Tierra o en el espacio, será capaz de escrutar sistemas solares distantes en busca de señales de vida en exoplanetas similares a la Tierra, incluyendo los que estén en órbita a las estrellas "jubiladas" conocidas como enanas blancas.
Las enanas blancas representan la etapa final de la vida de las estrellas como nuestro Sol. Una enana blanca es el núcleo muy compacto de material estelar residual que queda después de haberse agotado el combustible disponible para las reacciones nucleares. Aunque conservan bastante masa, estos astros están tan comprimidos que su diámetro no es muy distinto del de la Tierra.
Unos astrónomos de la Universidad Cornell en Ithaca, Nueva York, Estados Unidos, han ideado una estrategia para analizar el espectro de la luz proveniente de estrellas de ese tipo y han determinado qué huellas sutiles denotarían la presencia de planetas rocosos (como la Tierra o Marte) en torno a ellas.
La clave para lograr una detección así es captar el fugaz instante en que un exoplaneta (planeta de fuera de nuestro sistema solar) transita justo por delante de su estrella, desde la perspectiva visual de la Tierra.
El equipo de las astrónomas Thea Kozakis y Lisa Kaltenegger ha mostrado cómo podrían ser las huellas espectrales y lo que esos futuros telescopios espaciales y terrestres de gran resolución podrían buscar.
![[Img #60191]](https://noticiasdelaciencia.com/upload/images/05_2020/3387_jack-madden-kozakis-1b-a.jpg)
Algún día, las observaciones astronómicas harán posible analizar a fondo las atmósferas de exoplanetas rocosos similares a la Tierra, como este del cual se puede contemplar una panorámica desde gran altura, en una recreación artística. La enana blanca en torno a la cual gira el planeta se divisa en el horizonte de este. (Imagen: Jack Madden / Cornell University)
En solo unos pocos años, los astrónomos, utilizando instrumentos muy avanzados como el Telescopio Extremadamente Grande (ELT, por sus siglas en inglés), actualmente en construcción en el desierto de Atacama del norte de Chile, y el Telescopio Espacial James Webb, cuyo lanzamiento al espacio está programado para 2021, serán capaces de buscar vida en los exoplanetas que escruten.
Los planetas rocosos alrededor de enanas blancas son buenos candidatos a la detección y análisis porque sus estrellas no son mucho más grandes que los planetas del tamaño de la Tierra. "Estamos esperando y buscando ese tipo de tránsito", recalca Kozakis.
Kozakis, Kaltenegger y Zifan Lin determinaron los modelos espectrales correspondientes a diferentes atmósferas a diferentes temperaturas con el fin de crear una especie de guía que ayude a reconocer posibles bioseñales.
En caso de detectarse algún día señales de vida en un planeta en órbita a una enana blanca, se plantearán muchas preguntas, entre ellas cómo pudo la vida sobrevivir al cese de la actividad nuclear de la estrella, un cese precedido de transformaciones en esta última capaces de aniquilar a los planetas más cercanos. (Fuente: NCYT Amazings)



