Consumo de alcohol y aborto espontáneo

Aunque la mayoría de las mujeres dejan de consumir alcohol después de una prueba de embarazo positiva, el consumo de alcohol en la fase inicial de la gestación, antes de descubrir que están embarazadas, no es inusual. Una nueva investigación se ha ocupado de calcular qué riesgo de aborto espontáneo puede generar el consumo de alcohol dependiendo de hasta qué semana de la gestación se prolonga. En el estudio también se han examinado otros parámetros, como por ejemplo el tipo de alcohol consumido durante el embarazo, y se ha analizado cómo estos factores se relacionan con el riesgo de aborto espontáneo antes de la semana número 20 de la gestación.

La mitad de las 5.353 mujeres analizadas en dicho estudio por el equipo de Katherine Hartmann, del Centro Médico de la Universidad Vanderbilt en Estados Unidos, declararon haber consumido alcohol alrededor de la fecha de la concepción y durante las primeras semanas del embarazo.

En promedio, las mujeres dejaron de consumir alcohol en el día 29 del embarazo. Aunque el 41% de las mujeres que dejaron de beberlo lo hicieron dentro de los tres días siguientes a una prueba de embarazo positiva, las que dejaron de consumirlo cerca de su período perdido tuvieron un 37% más de riesgo de aborto en comparación con las mujeres que no consumieron alcohol.

"Abstenerse del alcohol alrededor de la concepción o durante el embarazo ha sido aconsejado desde hace mucho tiempo por numerosas razones, incluyendo la prevención del síndrome de alcoholismo fetal. No obstante, los niveles modestos de consumo se consideran probablemente seguros. Por esta razón, nuestros hallazgos son alarmantes. Los niveles de consumo que las mujeres, y algunos profesionales de servicios de la salud, pueden creer que son prudentes, en realidad resultan perjudiciales, y no se puede sugerir ninguna cantidad como segura con respecto al riesgo de aborto", denuncia la Dra. Hartmann.

Katherine Hartmann. (Foto: Vanderbilt University Medical Center)

En el estudio se ha calculado que cada semana que una mujer consume alcohol durante las primeras cinco a diez semanas del embarazo, ello conlleva un incremento del 8% en el riesgo de aborto.

El impacto del consumo de alcohol aumenta hasta la novena semana de embarazo, y el riesgo se acumula. El riesgo es independiente del tipo de alcohol consumido. (Fuente: NCYT de Amazings)