Medicina
Drenaje linfático manual postoperatorio
Artículo escrito por el Dr. Julio Terrén, Cirujano Plástico y Doctor en Medicina
El drenaje linfático post liposucción reduce la inflamación y la formación del tejido cicatrizal, ayudando a obtener unos mejores resultados y menor tiempo de recuperación.
Tras el sistema circulatorio de la sangre, el sistema linfático constituye el segundo sistema de transporte más importante del organismo. Ambos sistemas, circulatorio (arterias y venas) y linfático (vasos linfáticos y ganglios), trabajan juntos para que pueda existir un equilibrio óptimo de líquidos en los tejidos.
El sistema linfático se ubica a un nivel bastante superficial, por debajo de la piel, y recibe su nombre porque por él circula un líquido llamado linfa.
La linfa es un líquido transparente que transporta células que ayudan a combatir las infecciones y otro tipo de enfermedades. Tiene una importante función inmune, ya que gracias a contener glóbulos blancos, especialmente linfocitos, actúa como barrera frente a infecciones.
Además, es un medio de transporte que emplea el organismo para eliminar toxinas, residuos, organismos patógenos y otros productos recogidos del tejido que rodea a las células. Su contenido desemboca en el sistema circulatorio, a partir del que se eliminan los desechos. El ser humano puede albergar 15 litros de linfa
Los conocidos como ganglios linfáticos son los encargados de filtrar la linfa que viaja desde los tejidos antes de que llegue a la sangre. Si el sistema linfático se obstruye o funciona a menor ritmo del habitual, se produce un desequilibrio de fluidos en los tejidos, además de problemas en la eliminación de desechos y en la función inmune del organismo, provocando inflamaciones, hinchazones, dolores localizados...
¿En qué consiste el drenaje linfático manual?
El drenaje linfático manual es un procedimiento recomendado tras intervenciones quirúrgicas que producen daños tisulares, es decir, daños en los tejidos, que se manifiestan con la aparición de hinchazón, moretones y edemas.
Se trata de un masaje mucho más suave que el masaje regular que se realiza en sesiones de una hora, y que es especialmente recomendado tras procedimientos invasivos como la liposucción o la abdominoplastia.
Hay que tener en cuenta que cuando el cirujano elimina grasa del cuerpo, o manipula distintas partes de la anatomía del paciente, se produce cierto daño a los vasos sanguíneos y linfáticos, además de destruir células y tejido conectivo. Esto provoca que la sangre y los fluidos linfáticos se acumulen.
El drenaje linfático manual no es un procedimiento doloroso, y no emplea aceites ni otros productos en la piel durante las sesiones. El número de sesiones necesarias varía en función del caso y del paciente: viene determinado por la cantidad de hinchazón, la capacidad de respuesta del paciente y de su compromiso con las prácticas de autocuidado.
Por nuestra propia experiencia podemos decir que se trata de una técnica segura con muy pocas complicaciones y/o contraindicaciones.
Las sesiones de drenaje linfático manual deben realizarse dentro de los primeros 6-7 días tras la intervención, para poder estimular el flujo de líquido a través del sistema linfático, ayudando a reducir la inflamación y la formación de tejido cicatrizal. Esto permite obtener unos resultados más óptimos y una disminución del tiempo de recuperación.
Esta técnica se suele combinar con el uso de prendas de compresión que reducen la acumulación de sangre y linfa, además de “unir” el tejido separado favoreciendo la cicatrización.
¿Cuáles son los beneficios del drenaje linfático en los procesos de recuperación quirúrgicos?
- Aumenta significativamente el flujo de líquido en los vasos linfáticos.
- Acelera el proceso de recuperación y disminuye el dolor.
- Reduce la inflamación local, la hinchazón y los moretones.
- Aumenta la eliminación de residuos celulares y otros desechos como las grasas libres.
- Disminuye el riesgo de infección ya que mejora la respuesta inmunológica.
- Disminuye la cicatrización y la formación de bultos duros.
- Mejora la textura y el tono de la piel.
Los pacientes que más se benefician del drenaje linfático manual son aquellos con mucha hinchazón, pacientes a los que las prendas de compresión no les han causado ningún efecto, pacientes que experimentan acumulación de líquido fuera del sitio quirúrgico...
Dr. Julio Terrén
Especialista en liposucción y abdominoplastia















