Ecología
Mejillones con masa corporal cada vez menor en el mar Báltico
Los mejillones azules en el mar Báltico son pequeños de manera natural; la longitud de estos mejillones es aproximadamente la de una uña humana corta. Sin embargo, en un nuevo estudio se ha descubierto que esos mejillones azules del mar Báltico pesan ahora alrededor de la mitad de lo que solían pesar en la década de 1990, aun cuando la diferencia de longitud media es de solo unos pocos milímetros. Por otra parte, ahora hay una mayor cantidad de mejillones pequeños, a veces hasta 1.000 en un metro cuadrado cuando antes lo normal es que hubiera unos 500 por metro cuadrado.
El estudio es obra de un equipo que incluye a las ecólogas Agnes Karlsson y Camilla Liénart, ambas de la Universidad de Estocolmo en Suecia.
Los mejillones constituyen la mayor biomasa de animales sin columna vertebral del mar Báltico, proporcionando alimento a peces y a ciertas aves. Pero debido a que su masa está menguando, ello conlleva menos alimento para las especies que se alimentan de ellos.
También se estima que el conjunto de todos los mejillones azules del Báltico es capaz de filtrar toda el agua del mar Báltico una vez al año. Esta labor de filtración resulta esencial para limpiar el agua, retirando de ella partículas y ayudando a combatir la eutrofización, una de las mayores amenazas que sufre el mar Báltico.
La disminución de la masa corporal de los mejillones podría tener efectos negativos en las tasas de filtración de agua del mar Báltico, aunque esto no se ha investigado en el nuevo estudio.
![[Img #62270]](https://noticiasdelaciencia.com/upload/images/11_2020/9925_mejillones-con-masa-corporal-cada-vez-menor-en-el-mar-baltico.jpg)
Dos mejillones azules del Báltico en la palma de una mano. (Foto: Thomas Tranåker)
Dado que en el nuevo estudio no se ha encontrado un papel directo del aumento de la temperatura en la disminución de la masa corporal del mejillón, todo apunta a que la influencia de ese calentamiento opera en los mejillones mediante efectos indirectos.
La razón por la que la masa corporal de los mejillones está disminuyendo es probablemente el cambio paulatino que en los últimos años viene produciéndose en la composición del fitoplancton. Este tiene ahora cantidades mayores de cianobacterias y de partículas de tierra que en el pasado.
El aumento de temperatura de las aguas, generado por el calentamiento global, favorece a las cianobacterias. Entre las consecuencias de estas mejores condiciones para ellas, destaca la mayor incidencia de los episodios de proliferación masiva de cianobacterias en verano. (Fuente: NCYT de Amazings)



