¿Cuál ha sido el impacto del confinamiento en las farmacias?

Más de 22.000 farmacias y más de 55.000 farmacéuticos repartidos por todo el país han hecho y hacen frente al coronavirus. Para ello, no solo han mantenido la habitual atención a sus clientes, también se han embarcado en un mayor despliegue de su potencial al objeto de garantizar la distribución de medicamentos a toda la población, reducir los riesgos de contagio, descongestionar centros de salud y hospitales y contribuir en iniciativas sociales como la ayuda y auxilio a mujeres víctimas de violencia de género o la recogida de alimentos y otros artículos de primera necesidad para personas en riesgo de exclusión social.

Pero, tras todo ese enorme esfuerzo, ¿cómo ha afectado la crisis del Covid-19 y el confinamiento a las farmacias? Para responder a estas dudas hemos acudido a Farmadoo, farmacéuticos profesionales que nos han contado su experiencia.

Farmacias: los profesionales clínicos más cercanos

Y es que durante el confinamiento, las farmacias se convirtieron en un espacio de referencia al que acudir no solo a pertrecharse de mascarillas, gel hidroalcohólico y todos aquellos productos de protección frente al Covid-19, sino también para preguntar y consultar todas aquellas dudas sobre salud a las que no podían dar respuesta los centros de salud, saturados o cerrados por los duros efectos de la pandemia.

La intensa labor de las farmacias frente a esta situación desconocida ha supuesto su reconocimiento como unos profesionales de la salud más, además del aplauso de la sociedad agradeciendo su cercanía y dedicación. Tal y como señalan los propios farmacéuticos, el confinamiento ha supuesto un antes y un después para todo el gremio, encontrándose ante un momento clave para que su papel dentro de la estructura sanitaria sea también reconocido por las administraciones.

El impacto del confinamiento y el Covid-19 en las farmacias

Pero el impacto no solo ha sido el reconocimiento de las farmacias como puntos básicos en la atención sanitaria, también han sido uno de los gremios más afectados por la enfermedad. Estar en los momentos más duros de la pandemia en primera línea se ha saldado en España con 21 farmacéuticos y técnicos de Farmacia fallecidos, a fecha de noviembre de 2020, y numerosos contagiados por la enfermedad.

Una triste situación que ha evidenciado su gran dedicación y la falta de material de protección que padecieron todos los sanitarios del país. Sea como fuere, los farmacéuticos se volcaron desde el primer momento en proteger a la población más vulnerable y frágil frente al Covid. Así, y gracias a una red de voluntarios, las farmacias se volcaron en hacer llegar los medicamentos a aquellas personas que por edad o enfermedad no debían exponerse a salir a la calle y correr riesgos de contagio.

Además, fueron uno de los pocos establecimientos que, por ofrecer productos y servicios de primera necesidad, pudieron abrir durante todo el confinamiento, convirtiéndose también en punto de auxilio para todas aquellas mujeres que estuviesen padeciendo malos tratos a manos de sus parejas y no supiesen a dónde acudir en busca de ayuda. En los momentos más duros del confinamiento, las farmacias también fueron el punto en el que poner en marcha el protocolo de violencia de género.

Nadie duda que el papel de las farmacias en la sanidad y la sociedad ha salido reforzado tras el confinamiento y que ahora más que nunca ver la cruz verde de una farmacia nos reconforta y hace sentir seguros.