Conflicto entre padres ya divorciados y riesgo de problemas de salud mental en sus hijos

El divorcio es en bastantes ocasiones una experiencia traumática para los hijos de la pareja. Pero una vez consumado este, ¿hasta qué punto la aparición de un nuevo conflicto entre los progenitores divorciados puede repercutir negativamente en la salud mental de los hijos? Un estudio ha examinado la cuestión.

El equipo de Karey O'Hara, profesora de psicología en la Universidad Estatal de Arizona, Estados Unidos, analizó los casos de 559 niños y adolescentes de entre 9 y 18 años, hijos de parejas divorciadas.

Aunque pueda parecer que, una vez consumada la ruptura de la pareja, la aparición de nuevos conflictos entre el padre y la madre no va a tener efectos negativos significativos sobre el estado de ánimo de los hijos, el equipo de O'Hara ha constatado que el conflicto entre padres divorciados o separados sí aumenta de manera significativa el riesgo de que los niños desarrollen problemas de salud mental.

O'Hara y sus colegas han comprobado que en la mayoría de casos en los que el padre y la madre divorciados o separados entran en conflicto, los niños tienen miedo a ser abandonados por uno de sus progenitores o por los dos.

Examinando todos los casos, se constató que el miedo a ser abandonado permitía predecir con notable grado de acierto el surgimiento de futuros problemas de salud mental en los niños.

Karey O'Hara. (Foto: Robert Ewing)

También han participado en la investigación C. Aubrey Rhodes, Sharlene Wolchik, Irwin Sandler y Jenn Yun-Tien, todos de la Universidad Estatal de Arizona. (Fuente: NCYT de Amazings)