Hablar con robots militares

El diálogo hablado es la forma más natural que tiene la gente para interactuar con otras personas y también sería la manera ideal de hacerlo con robots.

En ese ámbito, una línea de investigación y desarrollo que ha registrado avances importantes recientemente es la encaminada a lograr una buena interacción verbal de soldados con robots militares del Ejército (de tierra) estadounidense.

En particular, destaca un proyecto en el que trabajan expertos del DEVCOM (U.S. Army Combat Capabilities Development Command), el Laboratorio de Investigación del Ejército y el Instituto de Tecnologías Creativas de la Universidad del Sur de California en Estados Unidos. El proyecto está orientado a lograr que los robots militares más inteligentes e incluso vehículos con capacidades automáticas puedan, de manera más flexible que con enfoques tradicionales, interpretar lo que les diga un soldado y contestar a ello.

Esta tecnología es actualmente el componente principal para el procesamiento de diálogos del sistema JUDI (Joint Understanding and Dialogue Interface), que permite interacciones conversacionales bidireccionales entre soldado y sistema autónomo complejo.

Felix Gervits, investigador del Ejército, destaca que al crear una interfaz de habla natural entre un humano y un sistema autónomo complejo, se facilita la labor en situación de manos libres, lo que puede resultar decisivo desde el punto de vista táctico ante peligros.

La nueva línea de investigación y desarrollo busca lograr que los robots y otros sistemas autónomos complejos del ámbito militar dispongan de mayor flexibilidad a la hora de interpretar lo que un soldado les dice y de decidir cómo responder. (Foto: 1st Lt. Angelo Mejia)

Una ventaja es que, al tratarse de una interfaz de habla natural, no se requiere de los soldados un entrenamiento especial para tratar con robots y otros sistemas autónomos complejos. Pueden hacerlo desde el primer momento.

Otra ventaja es que el sistema también destaca en el manejo del habla "ruidosa", que incluye pausas, rellenos y disfluencias, todas las características que uno esperaría en una conversación normal con humanos. Además, puede operar en tiempo real sin retrasos debidos al procesamiento de datos, gracias a lo cual la conversación puede ser fluida.

En comparación con los enfoques comerciales de aprendizaje profundo (una rama de la inteligencia artificial), que requieren grandes y costosos conjuntos de datos para entrenar al sistema, el nuevo enfoque requiere una cantidad de ejemplos de entrenamiento que es varios órdenes de magnitud menor.

Uno de los futuros pasos en esta línea de investigación y desarrollo es posibilitar el aprendizaje de los robots mediante el diálogo en tiempo real. Un ejemplo de ello es que un robot encuentre algo nuevo en el entorno y pregunte a un soldado qué es. Otro paso a dar es integrar modalidades de interacción adicionales al habla entre humano y robot, como la mirada y los gestos, para una interacción más sólida. (Fuente: NCYT de Amazings)