Medicina
Crean cartílago de nariz mediante bioimpresión 3D
La pérdida de cartílago en la nariz como consecuencia de accidentes o enfermedades deja desfigurada a la persona. Para solucionar este y otros problemas derivados de su ausencia, se suele extraer cartílago de una de las costillas del paciente y remodelarlo para que tenga el tamaño y la forma necesarios para la cirugía reconstructiva. Pero el procedimiento acarrea riesgos. Para empezar, la extracción de cartílago implica intervenir en un punto anatómico de un modo que puede acabar perjudicando a un pulmón. Además, el cartílago implantado en la nariz tiende a adoptar la curvatura de la costilla en vez de mantener la forma adecuada para la nariz.
Un equipo multidisciplinar, que incluye a Adetola Adesida, Yaman Boluk y Xiaoyi Lan, los tres de la Universidad de Alberta en Canadá, ha ideado un método más simple y seguro de obtener cartílago para cirugías de esa clase.
El nuevo método se basa en utilizar la tecnología de bioimpresión en 3D para crear cartílagos con formas personalizadas.
Los investigadores utilizaron un hidrogel especialmente diseñado (un material similar a la gelatina) que puede mezclarse con células extraídas de un paciente y luego imprimirse a modo de tinta generando una estructura 3D con una forma específica. Para determinar cuál debe ser la forma exacta, se recurre a captar imágenes en 3D.
El material resultante se mantiene en condiciones de cultivo en el laboratorio y en varias semanas se convierte en cartílago funcional.
El cartílago bioimpreso en 3D se moldea en una curva adecuada para su uso en la reconstrucción de una nariz. El nuevo método podría acabar sustituyendo al tradicional de tomar el cartílago de una costilla del paciente, un procedimiento que puede traer problemas. (Foto: University of Alberta)
La obtención del material inicial del paciente es fácil y segura. "Se acomodan en la mesa de operaciones, se les realiza una pequeña biopsia de la nariz en unos 30 minutos, y a partir de ahí podemos construir diferentes formas de cartílago específicamente para ellos", explica Adesida. "Incluso podemos almacenar las células y utilizarlas después para construir todo lo necesario para la cirugía. Esto es lo que permite hacer esta tecnología".
El equipo sigue investigando y ahora está probando si el cartílago cultivado en laboratorio conserva sus propiedades tras el trasplante en modelos animales. El equipo espera comenzar los ensayos clínicos dentro de dos o tres años.
Adesida y sus colegas han publicado en la revista académica The FASEB Journal los detalles de su nuevo método, bajo el título “Bioprinting of human nasoseptal chondrocytes laden collagen hydrogel for cartilage tissue engineering”. (Fuente: NCYT de Amazings)