Reconstruye tu figura tras el parto con el MommyMakeover

Artículo escrito por el Dr. Julio Terrén

Cualquier mujer que haya sido madre y haya pasado por un embarazo sabe que, pese a que es una experiencia profunda y mágica, conlleva importantes cambios físicos. Es normal que se estiren los músculos abdominales, que se generen depósitos de grasa que no responden ni a la dieta ni al ejercicio, que aparezca piel sobrante debido a los cambios bruscos de peso… a esto hay que añadir que debido a la lactancia los pechos cambian de volumen, forma y posición, teniendo predisposición a descolgarse.

Para poder recuperar la figura y volver al estado anterior al embarazo se necesita sacrificio, esfuerzo y, sobretodo, mucho tiempo. Por ello, es normal que muchas mujeres recurran a la cirugía estética como alternativa para recuperar la figura y el contorno corporal de manera rápida y eficaz.

En los últimos años ha ganado popularidad el término anglosajón Mommy Makeover, que hace referencia al conjunto de intervenciones, tratamientos y/o procedimientos de cirugía plástica y medicina estética, destinados a aquellas mujeres que acaban de ser madres y que desean recuperar la figura previa al embarazo.

Este conjunto de tratamientos de cirugía estética post parto suelen realizarse –en la medida de lo posible- en una única operación, y ayudan a la mujer a recuperarse de los estragos que el embarazo y la lactancia provocan en su silueta… o incluso mejorar el físico anterior.

Para que los resultados de los tratamientos se mantengan en el tiempo se recomienda hacerlos cuando ya no se vayan a tener más embarazos, ya que un nuevo embarazo podría deshacer los resultados obtenidos.

Algunos de los tratamientos que engloba el Mommy Makeover son:

Abdominoplastia o cirugía del abdomen

El embarazo estira la piel del abdomen y los músculos de la pared abdominal. La cirugía del abdomen tiene un triple objetivo: devolver la firmeza al abdomen tensando los músculos de la pared abdominal, eliminar los pliegues y el exceso de piel y acabar con los depósitos de grasa de las capas musculares del abdomen, para conseguir un vientre plano y una silueta más esbelta.

La incisión necesaria para llevar a cabo el procedimiento se realiza en la región abdominal más inferior; su extensión depende de la piel que sea necesario quitar. En ocasiones se puede hacer coincidir con la cicatriz de la cesárea.

Liposucción

En ocasiones no basta con la abdominoplastia para renovar la apariencia del abdomen. Con la liposucción se pueden remover y eliminar los depósitos de grasa persistentes a la dieta y al ejercicio mediante su aspiración a través de finas cánulas que se introducen en el cuerpo a partir de pequeñas incisiones.

Con la liposucción no solo se trata la grasa del abdomen, también se pueden retirar las acumulaciones grasas en caderas, flancos, muslos e incluso en la parte superior de los brazos.

Hay que tener en cuenta que la liposucción es procedimiento destinado exclusivamente a eliminar la grasa, no tiene ningún efecto sobre la distensión de la piel o de los músculos.

El aumento de pecho

En un primer momento, el embarazo y el proceso de lactancia hace que los pechos ganen volumen y se vean llenos, pero tras este periodo es normal que las mamas empiecen a caerse y descolgarse, y que incluso pueden adoptar un aspecto como desinflado.

Los implantes mamarios permiten rellenar y restaurar el volumen de piel sobrante en las mamas. El espacio propio de cada mujer es el que nos indica la prótesis mamaria más adecuada. Hay que huir de los tamaños desproporcionados si lo que se quiere es conseguir un aspecto adecuado a las medidas de la paciente.

La elevación de mamas

El aumento de pecho permite añadir plenitud a los pechos, pero no puede corregir la flacidez de la piel. Con el levantamiento de senos se puede devolver a los senos a una posición más juvenil.

Se trata de un procedimiento que permite eliminar la piel suelta que se produce cuando se caen los tejidos, recolocar el complejo areola-pezón y colocar -siempre que sea necesario- implantes mamarios.

La intervención puede realizarse con o sin implantes en función de la cantidad de tejido mamario existente y de las preferencias de la paciente.

La reducción mamaria

Durante el embarazo los pechos se hinchan hasta alcanzar un tamaño y una forma mayores. Después se produce una reducción natural del tamaño de los pechos que deja a algunas mujeres con los senos caído, con un aspecto vacío.

En otros casos, sin embargo, los pechos siguen siendo más grandes de lo deseado después del parto. La cirugía de reducción mamaria puede ser la solución adecuada.

Además de devolver al pecho a su tamaño anterior, la reducción mamaria puede aliviar los síntomas comunes de los pechos grandes, como pueden ser los dolores, la postura inadecuada, las erupciones, los problemas respiratorios, las deformidades esqueléticas y la baja autoestima.

Con la reducción mamaria se elimina la grasa y el tejido glandular, tensando la piel para conseguir unos pechos más pequeños y ligeros que guarden una proporción más saludable con el resto del cuerpo.

Rejuvenecimiento facial

La piel también se cobra su factura debido al estrés y la fatiga que se produce durante y después del embarazo. La piel suave y juvenil deja paso a las arrugas y otras imperfecciones.

En los últimos años los tratamientos relacionados con la piel han ganado en popularidad y se han ido desarrollando técnicas de rejuvenecimiento facial como los peelings químicos, los rellenos faciales con ácido hialurónico o grasa propia y/o la microdermoabrasión… que son procedimientos que ayudan a las madres a rejuvenecer su rostro y revolucionar su apariencia.

Dr. Julio Terrén
Especialista en cirugía estética postparto
drterren.com