Zoología
¿Arañas depredadoras de serpientes?
Las arañas son principalmente insectívoras, pero a veces amplían su menú cazando y comiendo otros animales. Por otra parte, hay casos documentados de luchas a muerte entre araña y serpiente que demuestran que ambos animales se enfrentan más a menudo de lo que podría parecer. Una investigación reciente se ha centrado en averiguar hasta qué punto las arañas matan serpientes y se las comen, ejerciendo de depredadoras de estas.
El estudio lo han realizado Martin Nyffeler, de la Universidad de Basilea en Suiza, y Whitfield Gibbons, de la Universidad de Georgia en Estados Unidos.
En la investigación, Nyffeler y Gibbons analizaron más de 300 informes sobre casos de arañas devorando a serpientes.
Resulta que las arañas se comen a las serpientes en todos los continentes excepto en la Antártida. El 80% de los incidentes estudiados se observaron en Estados Unidos y Australia. En Europa, en cambio, este comportamiento alimentario de las arañas se ha observado en muy pocas ocasiones y se limita al consumo de pequeñas serpientes no venenosas de la familia de las serpientes ciegas (Typhlopidae) por parte de arañas tejedoras.
El análisis de los datos también mostró que arañas de 11 familias diferentes son capaces de atrapar y comer serpientes. "Que tantos grupos diferentes de arañas coman a veces serpientes es un hallazgo completamente novedoso", subraya Nyffeler.
Una serpiente inmadura atrapada en la telaraña de una araña de la especie Latrodectus geometricus, en una vivienda de Georgia, Estados Unidos. (Foto: Daniel R. Crook)
Ciertas arañas de la familia Theridiidae resultaron ser las cazadoras de serpientes que tuvieron éxito en casi la mitad de los incidentes observados. Su potente veneno contiene una toxina que actúa específicamente contra el sistema nervioso de los vertebrados. Estas arañas construyen telarañas extremadamente resistentes, lo que les permite capturar presas más grandes como lagartos, ranas, ratones, pájaros y serpientes.
Otro hallazgo hecho en el metaanálisis: las arañas pueden derrotar a serpientes de siete familias diferentes. Son capaces de vencer a serpientes de hasta 10 e incluso 30 veces su tamaño.
Las serpientes más grandes capturadas por las arañas tienen hasta un metro de longitud, y las más pequeñas solo unos seis centímetros. Según el análisis estadístico realizado por los dos investigadores, la longitud media de las serpientes capturadas era de 26 centímetros. La mayoría de las serpientes capturadas eran animales muy jóvenes, casi recién nacidos. El hecho de que algunas arañas sean capaces de dominar a presas de tan gran tamaño se debe a sus potentes neurotoxinas y a sus robustas telatañas.
Muchas especies de arañas que ocasionalmente matan y comen serpientes tienen un veneno que también puede ser letal para los humanos.
En bastantes casos, las serpientes derrotadas por las arañas no son precisamente inofensivas: alrededor del 30% son venenosas. En Estados Unidos y Sudamérica, las arañas matan a veces serpientes tan temibles como la de cascabel y la de coral, altamente venenosas. En Australia, las serpientes marrones (que se encuentran entre las serpientes más venenosas del mundo y de hecho pertenecen a la misma familia que las cobras) suelen ser presas de la araña de lomo rojo, estrechamente emparentada con la viuda negra.
Aunque la araña que mata a una serpiente se da un festín, no suele consumir más que una pequeña parte de su presa; el resto se lo comen las hormigas, las moscas y otros.
El estudio se titula “Spiders (Arachnida: Araneae) feeding on snakes (Reptilia: Squamata)”. Y se ha publicado en la revista académica American Journal of Arachnology. (Fuente: NCYT de Amazings)