Climatología
Calentamiento global e incendios forestales
En muchas partes del mundo, se viene registrando un aumento en la incidencia de los incendios forestales. Una investigación ha explorado la posible conexión de esta tendencia con el cambio climático global.
El equipo integrado, entre otros, por Rong Fu y Yizhou Zhuang, ambos de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) de Estados Unidos, ha centrado su investigación en el caso de ese país.
El aumento de la destrucción causada por los incendios forestales en Estados Unidos es dramático. De 1984 a 2000, la superficie media quemada en 11 estados del oeste fue de 1,69 millones de acres al año. De 2001 a 2018, la superficie media quemada fue de aproximadamente 3,35 millones de acres al año. Y en 2020, la cantidad de terreno quemado por los incendios forestales en el oeste alcanzó los 8,8 millones de acres.
Pero los factores que han provocado ese aumento masivo han sido objeto de debate: ¿Qué parte de la tendencia fue causada por el cambio climático inducido por el ser humano y qué parte podría explicarse por la variación natural del clima con fenómenos como un deshielo más temprano en primavera y una reducción de las lluvias en verano?
Para el estudio, Fu y sus colegas aplicaron la inteligencia artificial a los datos sobre el clima y los incendios para estimar el papel que desempeñan el cambio climático global y otros factores en la determinación de la variable climática clave vinculada al riesgo de incendios forestales: el déficit de presión de vapor.
El déficit de presión de vapor mide la cantidad de humedad que puede contener el aire cuando está saturado, menos la cantidad de humedad que hay en el aire. Cuando el déficit de presión de vapor es mayor, el aire puede extraer más humedad del suelo y las plantas. Las grandes zonas quemadas por incendios forestales, especialmente las que no están situadas cerca de zonas urbanas, suelen tener déficits altos de presión de vapor, condiciones que se asocian a un aire cálido y seco.
El humo de un incendio forestal del norte de California en 2019 pudo ser visto por los astronautas a bordo de la Estación Espacial Internacional. (Foto: NASA)
En el estudio se descubrió que el 68% del aumento del déficit de presión de vapor en el oeste de EE.UU. entre 1979 y 2020 se debió muy probablemente al calentamiento global provocado por el ser humano. Los autores del estudio han llegado a la conclusión de que el 32% restante se debió probablemente a cambios naturales en los patrones meteorológicos.
Los resultados sugieren que el cambio climático inducido por el ser humano es la principal causa del aumento de los incendios forestales en el oeste de Estados Unidos. Y nada hace pensar que esa no sea la causa principal en buena parte del resto del mundo.
El estudio se titula “Quantifying contributions of natural variability and anthropogenic forcings on increased fire weather risk over the western United States”. Y se ha publicado en la revista académica Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS). (Fuente: NCYT de Amazings)