Ciencia en imágenes
El horror verdadero en esta máscara de hace mil años
Esta máscara de aproximadamente un milenio de antigüedad ya de por sí resulta tenebrosa, como también lo es el hecho de que fuese encontrada cubriendo el rostro de un difunto dentro de una tumba. Sin embargo, hay algo particularmente macabro en ella que ha sido revelado en un nuevo análisis químico.
La máscara no es un hallazgo reciente. Fue descubierta durante unas excavaciones arqueológicas realizadas a principios de la década de 1990 por el equipo de Izumi Shimada.
En dichas excavaciones se abrió la tumba de un hombre que falleció a una edad de entre 40 y 50 años y que perteneció a la élite de la cultura Sicán, que precedió a la Inca. La cultura Sicán existió entre los siglos IX y XIV a lo largo de la costa norte de lo que hoy es Perú.
Entre los muchos artefactos de oro encontrados en la tumba, figuraba esta máscara de oro, pintada parcialmente de color rojo y que cubría el rostro del difunto.
En su momento, se identificó el pigmento rojo de la pintura de la máscara como cinabrio.
Sin embargo, se usó también otra sustancia roja, como se ha descubierto en un análisis reciente.
![[Img #65345]](https://noticiasdelaciencia.com/upload/images/12_2021/213_ciencia-en-imagenes-el-horror-verdadero-en-esta-mascara.jpg)
La máscara. (Foto: adaptada de: Journal of Proteome Research 2021, DOI: 10.1021/acs.jproteome.1c00472)
En el nuevo estudio, Shimada, de la Universidad del Sur de Illinois en Estados Unidos, así como Elisabete Pires, Luciana da Costa Carvalho y James McCullagh, los tres últimos de la Universidad de Oxford en el Reino Unido, han detectado en la pintura la presencia de proteínas de sangre humana.
Ello demuestra que en la pintura se utilizó no solo cinabrio sino también sangre humana, lo que hace que la máscara resulte más siniestra aún. (Fuente: NCYT de Amazings)



