De lagarto a serpiente

Por lo que se sabe, las serpientes surgieron a partir de ancestros con patas cada vez más cortas.

Un ejemplo de cómo pudieron ser esos ancestros y cómo pudo desarrollarse esa transformación anatómica evolutiva lo tenemos en el lagarto de la especie Brachymeles kadwa, mostrado en la foto.

Las patas del Brachymeles kadwa son llamativamente pequeñas en comparación con el tronco, hasta el punto de hacernos dudar entre si estamos ante un lagarto de patas ultracortas o ante una serpiente con apéndices pequeños.

Por ello, la especie Brachymeles kadwa resulta un buen sucedáneo actual de alguno de los ancestros de la serpiente que fueron parte de la transformación evolutiva que va desde animales antiguos comparables a lagartos hasta las serpientes de hoy en día.

Un ejemplo evidente de la utilidad del actual Brachymeles kadwa para investigar la antigua transición de lagarto a serpiente la tenemos en un estudio recientemente completado por el equipo de Daniel Goldman, del Instituto Tecnológico de Georgia en Estados Unidos.

(Foto: Philip Bergmann, Clark University)

En dicho estudio, se han analizado los movimientos corporales de ese y otros lagartos parecidos, descubriéndose que, en líneas generales, cuanto más cortas son las patas de un lagarto, más se parecen sus movimientos corporales de locomoción a los de las serpientes. No hay una frontera clara, sino una gradación en los movimientos de ese tipo. Es previsible que el antiguo paso de lagarto a serpiente también se caracterizase por una gradación en vez de por un cambio súbito. (Fuente: NCYT de Amazings)