Energía solar
Paneles solares flexibles: concepto y características
Las energías alternativas se presentan como una excelente solución para muchos hogares que quieran reducir el gasto de electricidad y emitir menos gases contaminantes. De hecho, el certificado de eficiencia energética es de gran ayuda para conocer las características energéticas de una vivienda. Este documento sirve para saber el consumo anual necesario para dar respuesta a la demanda y hacer un proyecto solar fotovoltaico optimizado.
Sin embargo, no siempre todos los inmuebles reúnen las características adecuadas para sacar el máximo partido a esta instalación. Por esta razón, se han diseñado paneles solares flexibles, que se puedan adaptar a cualquier superficie. El único requisito es que reciban la suficiente radiación solar para transformar la energía continua en alterna.
Las ventajas de los paneles solares flexibles en un hogar
Normalmente, los usuarios de una vivienda unifamiliar no tienen problemas para la instalación de placas solares y conseguir el máximo rendimiento. No obstante, en las comunidades de propietarios, donde no se ponen de acuerdo para realizar este tipo de proyectos, habrá vecinos que quieran beneficiarse de la energía solar, por lo que buscarán otras opciones.
Hasta el momento, las placas solares flexibles eran la mejor opción para las embarcaciones o caravanas, con la finalidad de proporcionar energía renovable y limpia. Sin embargo, este tipo de panel, con una estructura delgada, también se convierte en una buena elección para los toldos y balcones.
A diferencia de un panel rígido, tanto si es monocristalino o policristalino, se emplean capas de silicio hasta 300 veces más pequeñas que las que utiliza una placa estándar. Esto es lo que garantiza que pueda flexionarse fácilmente y ser más funcional. Si bien es cierto, que esta característica es clave para colocar en superficies con mayor complejidad, nunca son tan eficientes como los rígidos. Su grado de eficiencia está entre el 7 % al 15 %, mientras que en el otro caso, estamos hablando del 16 % al 20 %.
Una de las grandes ventajas de este tipo de paneles es su fácil colocación, ya que no hay que hacer reformas. Solamente, hay que conectar el cable a un enchufe para que la energía llegue al domicilio. Además, un kit de panel solar flexible se entrega ensamblado para una fácil instalación. Por este motivo, si la persona cambia de residencia, puede desinstalarlo y colocarlo en otro lugar.
Una de las principales dudas que surgen es cómo elegir el mejor panel para nuestro hogar. En ese aspecto, tendremos que tener en cuenta, el diseño, la eficiencia, la potencia, el presupuesto y la durabilidad. El usuario debe saber que la vida útil está entre los 15 y 25 años aproximadamente.
Otro aspecto determinante es el tipo de superficie, no es lo mismo un espacio curvo que uno plano, así como un balcón más grande que otro de pequeñas dimensiones. Por lo tanto, si la curva es muy pronunciada, lo mejor es apostar por una placa que permita mayor movilidad.
En definitiva, la instalación de paneles solares flexibles es una gran opción para reducir el consumo energético en un hogar, si tenemos en cuenta el precio desorbitado de la luz. Sin embargo, lo mejor es ponerse en contacto con profesionales y aportarles el certificado eficacia energética para que estudien las características del inmueble para obtener el máximo rendimiento.