Salud
Suplementos para la digestión, dile adiós a la pesadez y las malas sensaciones tras comer
Las comidas copiosas y los excesos, especialmente cuando hay abusos de alimentos poco digestivos y del alcohol, hacen que aumenten los problemas estomacales. Por suerte, hay fórmulas para ponerle freno a estas digestiones pesadas. Una de ellas pasa por acudir a suplementos para la digestión, y además, esta se puede complementar con la ingesta de ciertos alimentos saludables, evitando otros, y con buenos hábitos que faciliten un buen tránsito.
¿Cómo ayuda en el tránsito digestivo suplementar el organismo con complementos alimenticios?
Un apunte inicial que es básico, los suplementos no sustituyen nunca a una dieta equilibrada, sino que son soluciones a modo de complemento, una ayuda para facilitar el tránsito. Existen muchos productos de este tipo que resultan eficientes para aliviar gases esporádicos o recurrentes.
En el primer caso, las plantas son de gran ayuda. La fitoterapia se muestra muy eficaz, siempre que se acuda a especies con efecto antiespasmódico y digestivo. El comino, el anís, la manzanilla, la hierbaluisa o la menta poleo son buenos ejemplos. Estas plantas se pueden tomar a modo de infusiones o mediante suplementos.
Más allá de esta idea están los preparados de carbón, que actúan adsorbiendo las partículas de gas; o las siliconas, que previenen la formación de gases en el tubo digestivo y facilitan la expulsión de los mismos.
En caso de que los gases sean recurrentes, tengan una incidencia mayor y continua en el organismo, el tratamiento debe ser ingerido durante más tiempo. Insistimos, nunca ha de sustituir a una dieta equilibrada. Los expertos recomiendan mantener el consumo de suplementos para la digestión durante al menos un mes, y no solo cuando se sientan gases.
Aquí aparecen como posibilidad los probióticos. Estos agentes ayudan a mantener el buen estado de la flora intestinal, la regeneran y reducen el efecto pernicioso de algunos antibióticos. En el caso de las molestias estomacales, son especialmente interesantes para combatir el síndrome de colon irritable, el estreñimiento y algunas intolerancias y alergias alimentarias.
Otra opción pasa por las enzimas digestivas, que existen numerosas. Cuando se ingieren a modo de complementos, lo que hacen es actuar frente a la baja cantidad de estos compuestos en el organismo. Su ingesta es muy adecuada en caso de intolerancias a ciertos alimentos y digestiones muy pesadas.
La fibra, sobre todo la soluble, retiene el agua en el tracto digestivo y permite que la digestión sea más lenta. Además, proporciona sensación de saciedad y modula la absorción de las grasas. Es también positiva para regular la insulina.
En el blog Microbiota y Bienestar puedes encontrar consejos sobre el estreñimiento y otros problemas de salud. Se trata de un espacio en el que colaboran profesionales como médicos y farmacéuticos, con contenidos de alta calidad.
Hábitos que favorecen las buenas digestiones
El apartado de hábitos saludables está muy vinculado, no solo a lo que se come, sino a cómo se come y qué estilo de vida llevas. Si no masticas bien, te das atracones constantes de comida y adquieres malas posturas en la mesa, con respiraciones incorrectas, todo esto acabará pasando factura en las digestiones.
En este sentido, es muy importante dedicar el espacio de tiempo de la comida, a la comida. No hay que renunciar a una buena conversación en grata compañía, pero recuerda que los alimentos hay que masticarlos bien. No comas muy deprisa y olvides la masticación, ten paciencia cuando estés sentado a la mesa.
Por otra parte, los alimentos deben ingerirse a la temperatura correcta, no muy calientes, pero tampoco muy fríos. Las temperaturas extremas irritan la mucosa digestiva. En especial, las sopas, las infusiones y el café, deja que se atemperen un poco.
Una tercera recomendación es llegar calmado a la mesa. Las emociones afectan al proceso digestivo. Las situaciones de estrés y ansiedad son muy peligrosas, porque hacen que los nervios se concentren en el estómago y esto acaba generando dolor. Mientras comes, intenta evadirte de los problemas, si es que eso es posible.
Otro apunte importante es la respiración. Si introduces oxígeno al organismo de manera adecuada, inhalando por la nariz, llegará más cantidad de este gas al estómago, y esto mejora su función, pues las células pueden hacer la respiración.
El apunte final es mantener un poco de actividad física muy moderada tras comer, para facilitar la digestión. Basta con caminar unos minutos, de manera muy suave, para así evitar el estreñimiento. La simple fuerza de la gravedad prepara el bolo fecal para una excreción más sencilla.



