Salud auditiva y medicina del sueño
¿Relación entre la calidad del sueño y la pérdida de audición?
La pérdida de audición afecta a más de 1.500 millones de personas en el mundo y la proyección para los próximos años indica un aumento importante de su prevalencia. La pérdida de audición se asocia a múltiples problemas de salud como la demencia, el síndrome de fragilidad, la depresión y la discapacidad; además, tiene un alto coste económico y social.
La pérdida de audición no tiene cura. En la actualidad, solo existen tratamientos con eficacia limitada. Es por ello que encontrar factores que prevengan la pérdida de audición es del máximo interés para la comunidad científica internacional.
En esta línea, unos investigadores de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM), IMDEA Alimentación y el Centro de Investigación Biomédica en Red de Epidemiología y Salud Pública (CIBERESP), en España todas estas entidades, analizaron información de más de 230.000 participantes en el estudio UK Biobank.
Los autores del análisis examinaron diferentes aspectos de la mala calidad del sueño, caracterizada por presentar ronquidos nocturnos, somnolencia diurna, insomnio, dificultad para levantarse por la mañana y un cronotipo nocturno, y cómo estos influyen en el riesgo de padecer pérdida de audición.
Los resultados de la nueva investigación muestran un claro y robusto aumento del riesgo de pérdida de audición en aquellas personas que tienen una peor calidad del sueño, tal como explica el doctor Humberto Yévenes-Briones, investigador postdoctoral del Departamento de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad Autónoma de Madrid y primer firmante del estudio: “una pobre calidad del sueño exacerba nuestras probabilidad de desarrollar una pérdida de audición en el futuro, aumentando el riesgo hasta en un 49%”.
Los resultados del estudio indican que dormir mal aumenta el riesgo de pérdida de audición en gente de mediana edad y más mayor. (Imagen: Amazings / NCYT)
Según explica el doctor Francisco Félix Caballero, profesor del mismo departamento y segundo firmante del estudio: “no dormir las horas adecuadas durante la noche potenciaría el riesgo de pérdida de audición en aquellas personas con una peor calidad del sueño.”
El doctor Yévenes-Briones agrega: “dado que existen intervenciones efectivas para mejorar la calidad del sueño, nuestros resultados pueden abrir una nueva vía para la prevención de la pérdida de audición”.
También firman el trabajo los doctores Estrada-deLeón, Struijk, Mesas, Banegas, Rodríguez-Artalejo y López-García.
Aunque se necesitan más estudios longitudinales con periodos de seguimientos más prolongados, esta investigación abre una ventana en la prevención de la pérdida de audición y agrega conocimientos sustanciales sobre el impacto de la calidad del sueño en la función auditiva.
El estudio se titula “Duration and Quality of Sleep and Risk of Self-reported Hearing Loss: The UK Biobank Study”. Y se ha publicado en la revista académica Ear and Hearing. (Fuente: UAM)