Bomba de calor de aerotermia con recuperación de calor

Ya nadie tiene duda que la bomba de calor de aerotermia es un equipo con gran rendimiento y muy eficiente. Sin embargo, hace algunos años se desarrolló una innovación que consigue que aprovechamos aún más su funcionamiento durante el verano. ¿Conoces los sistemas con recuperación de calor? Estos equipos de aerotermia pueden calentar el agua sanitaria casi de forma gratuita, aprovechando el calor que la bomba de calor necesita disipar en el exterior.

Y, ¿cómo es posible calentar el agua de forma gratuita? La bomba de calor está diseñada para proporcionar calefacción durante el invierno, refrigeración en el verano y, además, calentar el agua sanitaria durante todo el año. Sin embargo, la tecnología de recuperación de calor nos proporciona agua caliente sin consumo adicional de electricidad durante el verano.

¿Cómo funciona una bomba de calor durante todo el año?

Para entender primero la tecnología de recuperación de calor, es conveniente entender primero cómo funciona la bomba de calor en sí, tanto en invierno como en verano.

El primer concepto a entender es que la bomba de calor no genera calor o frío al consumir un combustible, como lo pueda hacer una caldera de gas. Una bomba de calor absorbe el calor de un lugar para llevarlo a otro, es decir, no transforma un tipo de energía en otra, sino que la traslada.

Durante el invierno, la bomba de calor aprovecha la energía calorífica contenida en el aire del exterior, absorbiendo calor para trasladarlo al interior de nuestra vivienda o calentar el agua sanitaria, que usaremos para lavar, o en la ducha.

En cambio, durante verano hace lo contrario, es decir, un equipo de aerotermia absorbe el calor que hay en el interior de nuestra vivienda para llevarlo fuera. Así, se consigue un descenso de la temperatura en las habitaciones donde tenemos instalado un Split o un suelo radiante refrescante.

Hasta aquí es como funciona el tradicional aire acondicionado o la bomba de calor normal. Sin embargo, al observar detenidamente el funcionamiento en modo verano, nos damos cuenta de que hay un calor residual que estamos extrayendo de la vivienda, hacia el exterior.

Los que tienen dudas sobre esto, deben recordad que, al caminar por la calle durante el verano, recibimos una ráfaga de aire caliente que sale de la fachada de alguna tienda y nos sobresalta. Entonces, podemos pensar que, aunque en poca cantidad, durante el verano también necesitamos agua caliente sanitaria. Y, sin embargo, estamos desperdiciando un calor que se podría aprovechar para calentarla.

Esta es precisamente la solución que nos ofrece una bomba de calor con recuperación de calor.

¿Cómo funciona una bomba de calor con recuperación de calor?

La tecnología de recuperación de calor se introduce en los modelos de bomba de calor que disponen de los dos servicios, es decir, climatización y agua caliente sanitaria.

De modo que una bomba de calor tradicional, o sin el sistema de recuperación, únicamente puede atender una demanda de servicio a la vez. Es decir, durante el verano, cuando necesitamos refrigeración o aire acondicionado en nuestra vivienda, oficina o negocio, el equipo de aerotermia trabaja en modo frío. En este modo, que vemos con el número ① en el siguiente dibujo, roba calor del interior para expulsarlo al exterior.

Sin embargo, en esta situación no puede generar agua caliente sanitaria. Cuando se necesita agua caliente, se manda una “alarma” a la bomba de calor para que pare de trabajar en modo verano. Por ejemplo, cuando el agua está a 22 °C y nosotros la queremos a 45 °C, la bomba de calor debe parar el servicio de climatización.

Así, como se muestra en el número ② del dibujo, la bomba de calor dejará de darnos aire acondicionado, mientras se calienta el agua del acumulador. Además, durante este proceso la bomba de calor sigue consumiendo electricidad.

En cambio, viendo el funcionamiento de una bomba de calor con recuperación, tal como se muestra en el dibujo ③, observamos una gran diferencia. La tecnología de recuperación que disponen estos modelos de aerotermia, permite aprovechar parte del calor que retiramos del interior de la vivienda, para disiparlo en el acumulador de agua sanitaria, en vez desaprovecharlo en el exterior.

De este modo estamos calentando el agua sanitaria al mismo tiempo que enfriamos nuestra vivienda. Por ello estamos consiguiendo un ahorro de electricidad, al mismo tiempo que aumentamos la eficiencia energética de nuestra vivienda.

¿Dónde se aprovecha más una bomba de calor con recuperación?

Lógicamente, solo podemos aprovechar esta tecnología cuando necesitamos refrigeración. Por ello es recomendable la instalación de una bomba de calor de aerotermia en lugares donde la temporada de calor es más larga o, mejor dicho, en zonas geográficas con climas cálidos.

En estas regiones, utilizaremos durante la mayor parte del año el modo verano para aportarnos frío y, apenas o nada, la calefacción. Es por ello que, en estos casos, el aprovechamiento de la recuperación de calor será mayor y, por tanto, conseguimos un mayor ahorro en la factura de la luz.

También es recomendable su uso en viviendas grandes u oficinas, en los que hay habitaciones u oficinas que dan al sur y otras al norte. El motivo es claro, en este tipo de edificaciones, habrá zonas del edificio que, al recibir el sol directo, se calientan mucho. En cambio, las zonas orientadas al norte apenas llegan a calentarse.

Esto puede llevar a la situación en la que en algunas habitaciones u oficinas se demande refrigeración, mientras que en otras se necesite calor. En el caso de disponer de un sistema de bomba de calor tradicional, la primera persona que encienda el termostato de su habitación u oficina, dará orden a la bomba de calor de trabajar según su elección, perjudicando las necesidades de otros usuarios.

Es por ello que, esta tecnología se ha implantado primero en los sistemas VRF o de Volumen Variable de Refrigerante. Con el sistema de recuperación de calor, en cada estancia que dispone de termostato se puede marchar la temperatura que se desee. El kit de recuperación de calor se encargará de aprovechar el calor absorbido en una estancia, para inyectarlo en otra. Con ello, se ayuda en el ahorro del consumo eléctrico. Y lo que es más importante, ofreciendo un mayor confort a todos los usuarios.

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