Ecología
Almacenamiento de CO2 bajo tierra: ¿Una solución prometedora o un riesgo inminente?
En la lucha global contra el cambio climático, la tecnología de captura y almacenamiento de carbono (CAC) se ha destacado como una estrategia crucial para reducir las emisiones de dióxido de carbono (CO2). Sin embargo, la práctica de almacenar CO2 bajo tierra ha suscitado preguntas e inquietudes sobre su seguridad a largo plazo.
La Promesa del Almacenamiento Subterráneo:
La premisa detrás del almacenamiento de CO2 bajo tierra es simple pero potente. Se trata de capturar las emisiones de CO2 generadas por industrias y plantas de energía y bombearlas a formaciones geológicas profundas, como yacimientos de petróleo agotados o acuíferos salinos. Esta técnica busca evitar que el CO2 llegue a la atmósfera, contribuyendo así a mitigar el calentamiento global.
Pros de la Captura y Almacenamiento de Carbono (CAC) Subterráneo:
1. Reducción de Emisiones: Almacenar CO2 bajo tierra tiene el potencial de reducir significativamente las emisiones de gases de efecto invernadero, contribuyendo a frenar el cambio climático.
2. Reutilización de Infraestructuras Existente: La utilización de yacimientos de petróleo agotados ofrece una oportunidad para reutilizar infraestructuras ya existentes, lo que podría hacer que la transición hacia tecnologías de captura y almacenamiento sea más eficiente y económica.
3. Preservación de Ecosistemas: Al evitar que grandes cantidades de CO2 ingresen a la atmósfera, esta técnica podría contribuir a la preservación de ecosistemas vulnerables.
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Desafíos y Preocupaciones:
1. Fugas Potenciales: Una de las principales preocupaciones es la posibilidad de fugas de CO2 a la superficie desde las formaciones geológicas subterráneas, lo que podría tener consecuencias negativas para la salud humana y el medio ambiente.
2. Impacto en la Geología Subterránea: Inyectar grandes cantidades de CO2 podría afectar la estabilidad geológica de las formaciones subterráneas, desencadenando eventos sísmicos o dañando la integridad de los acuíferos.
3. Duración de los Efectos: La estabilidad a largo plazo de las formaciones geológicas para retener el CO2 sigue siendo una incógnita, y se requiere investigación adicional para evaluar los posibles impactos a lo largo del tiempo.
Investigación y Regulación:
Para abordar estas preocupaciones, es esencial una investigación continua y la implementación de regulaciones estrictas. Los estudios a largo plazo y la supervisión constante son clave para garantizar la seguridad y eficacia de la captura y almacenamiento de carbono subterráneo.



