Evolución
Otro origen evolutivo de las alas
Aunque se han descubierto restos de numerosas especies de dinosaurios emplumados, los dinosaurios que tenían plumas del tipo apto para permitir volar son bastante menos y pertenecen a un solo grupo. Los fósiles muestran que estas alas se desarrollaron inicialmente a partir de pequeñas alas primitivas o protoalas que no eran lo suficientemente fuertes para permitir el vuelo y cuya función original ha estado envuelta en el misterio.
El equipo encabezado por Jinseok Park, de la Universidad Nacional de Seúl en Corea del Sur, plantea la hipótesis de que esas protoalas con plumas pudieron ser usadas por pequeños dinosaurios insectívoros para agitar violentamente el aire a su alrededor y asustar a insectos voladores posados cerca, haciendo que echasen a volar y de ese modo fuesen detectados por el dinosaurio y cazados por este. Esta táctica de caza la siguen empleando en la actualidad bastantes pájaros.
Los autores del estudio construyeron un robot llamado Robopteryx para probar su hipótesis, basándose en el tamaño, la forma y el rango de movimiento estimados del dinosaurio Caudipteryx, un depredador bípedo del tamaño de un pavo real que vivió hace aproximadamente 124 millones de años.
Entonces usaron el Robopteryx para que batiese sus protoalas de maneras capaces de asustar eficazmente a insectos y que pudieran haber sido ejecutables por esos dinosaurios, y observaron las reacciones de saltamontes. Se emplearon estos insectos por pertenecer al orden Orthoptera, que ya existía en tiempos del Caudipteryx.
Los investigadores encontraron asociaciones positivas significativas entre el uso de las protoalas para asustar insectos y la cantidad de veces que estos echaban a volar. Con las protoalas, el 93% de los saltamontes sometidos a la prueba echaban a volar. Sin las protoalas, el porcentaje era de solo el 47%.
![[Img #71249]](https://noticiasdelaciencia.com/upload/images/01_2024/4568_otro-origen-evolutivo-de-las-alas.jpg)
A: Reconstrucción del Caudipteryx. (© Christophe Hendrickx. CC BY-SA 3.0) B: Robopteryx, imitando la morfología del Caudipteryx, posicionado frente a un saltamontes posado en el suelo (su ubicación está marcada con una flecha roja). (Foto: P.G. Jablonski). C: Uno de los saltamontes puestos a prueba en los experimentos. (Foto: Jinseok Park)
La conclusión de los autores del estudio es que las protoalas en ese grupo de dinosaurios surgieron evolutivamente con la finalidad de batir el aire para asustar más eficazmente a insectos voladores y hacer que emprendieran el vuelo fuera de sus escondrijos y fuesen más fáciles de cazar.
El estudio se titula “Escape behaviors in prey and the evolution of pennaceous plumage in dinosaurs”. Y se ha publicado en la revista académica Scientific Reports. (Fuente: NCYT de Amazings)



