ArtÃculo, del blog Bitnavegantes, que recomendamos por su interés.
Las plantas producen toxinas para defenderse de enemigos potenciales, desde plagas herbÃvoras hasta enfermedades. Las plantas de colza producen glucosinolatos que sirven a este propósito.
Sin embargo, debido al contenido en glucosinolatos, los agricultores sólo pueden usar cantidades limitadas de la semilla de colza, rica en proteÃnas, para alimentar a los cerdos y pollos. Ahora, un equipo de investigadores de la Universidad de Copenhague ha desarrollado un método que elimina las toxinas no deseadas de las partes comestibles de la planta.
El artÃculo, del blog Bitnavegantes, se puede leerÂ
aquÃ.